Alta cocina mediterránea de autor a las afueras de Madrid
Ana S. Diéguez
En el corazón de Boadilla del Monte se esconde una joya gastronómica que merece ser saboreada con calma y sin prisas. Lúbora no es solo un restaurante, sino un rotundo homenaje al sabor, la creatividad y la pasión por la buena mesa. Tras su inicio, en el corazón financiero de Madrid, este encantador proyecto capitaneado por el chef Raúl Harillo encontró en Boadilla un nuevo hogar en 2021, donde no cesa de cosechar adeptos.
Su nombre es una tierna combinación de los nombres de los perros de su artífice, Lúa y Bora. Una auténtica declaración de intenciones, que deja claro que aquí, las mascotas son siempre bienvenidas, al igual que sus dueños. El local es moderno, y luminoso, con una agradable terraza que resulta ideal para largas sobremesas y una carta que mezcla la cocina mediterránea con originales toques de autor que sorprenden y seducen a partes iguales.
Desde el primer bocado, la experiencia es puro disfrute. El siu-mai de secreto ibérico, con un toque picante gracias al shichimi togarashi, nos recibe con un delicioso guiño asiático a modo de aperitivo. Continuamos con un foie mi cuit que se presenta como un postre en formato salado. Un delicioso bocado en forma de «desierto» que va acompañado de geles de mango, guayaba y vino dulce. Una receta original y de perfecto equilibrio que nos hará volver muy pronto.
La carta continúa deleitándonos con joyas como el carpaccio de presa ibérica con vinagreta de pistachos, las setas shiitake con langostinos al ajillo y carbonara de jamón, y unas adictivas orejitas de cochinillo confitadas, crujientes y coronadas con chimichurri. Un plato fuera de carta que merece la pena pedir cuando lo tienen.
Las carrilleras a baja temperatura con puré especiado de calabaza y cacahuetes caramelizados nos llevan a Asia sin salir de Boadilla. Y, para los más castizos, los callos de Raúl Harillo, premiados como los mejores de Madrid en 2019, son un auténtico espectáculo, con mucho morro y una untuosa salsa en la que resulta obligatorio mojar.
El final dulce lo pone una espectacular tarta de manzana «a su estilo» que preparan con un hojaldre caramelizado, compota casera, manzana fresca y helado de vainilla de Madagascar. Un broche de oro perfecto para una velada que no se olvida fácilmente.
Con un ticket medio de unos cuarenta euros y con la opción de un menú degustación sorpresa por tan solo cincuenta y cinco euros, Lúbora Boadilla se posiciona como un lugar imprescindible para los amantes de la buena gastronomía. Ya sea para una ocasión especial o simplemente para darse un homenaje, este rincón lo tiene todo para enamorarnos. ¿Os podréis resistir?
Lúbora Boadilla
Dirección: Calle Mariano Barbacid 12,
28660 Boadilla del Monte, Madrid
Web: http://www.lubora.com/
Ticket Medio: 40€
Menú degustación: 55€
