A partir de las emisiones de CO2 generadas en el momento de la fabricación de los bienes , Simplr calcula el impacto en CO2 generado por el uso de estos por parte de sus clientes y lo compensa a través de inversión en proyectos medioambientales. Simplr, compañía española pionera en el ámbito de la economía circular y el pago por uso, permite acceder a través de un único marketplace a cualquier producto o servicio mediante un modelo de suscripción
Simplr, plataforma tecnológica española pionera en el ámbito de la economía circular y el pago por uso que permite acceder a cualquier producto o servicio necesario para la vida diaria mediante un modelo de suscripción y una fácil contratación y cancelación, compensará a partir de este mes la huella de carbono de todos los productos electrónicos utilizados por sus usuarios.
Acorde con los últimos datos publicados por Eurostat, la mayoría de los países miembros de la Unión Europea han vuelto a aumentar sus niveles de contaminación a raíz de la retirada de las medidas restrictivas para contener el avance del Covid-19. Concretamente, las emisiones de CO2 por el uso de energía emitidas por España en el año 2021, han repuntado un 7,4% respecto a 2020 colocándole como el sexto país que más las ha incrementado.
Sin embargo, lejos de lo que parece, el planeta posee otras muchas fuentes de emisiones diarias que habitualmente pasan desapercibidas. Es el caso de la fabricación de bienes relacionados con la tecnología como teléfonos móviles, ordenadores, relojes inteligentes o televisores, un proceso en el que se produce alrededor del 80% de su huella de carbono total.
Con intención de tratar de paliar estas cifras, la plataforma de pago por uso Simplr ha impulsado esta nueva iniciativa. Pionera en España en ofrecer este modelo de consumo flexible basado en la economía circular y adaptado a las necesidades de los ciudadanos, su objetivo es seguir contribuyendo al cuidado del planeta potenciando una producción más sostenible.
Para ello, la compañía calcula para cada uno de sus productos electrónicos la cantidad de emisiones de CO2 que el uso de estos producen en base al emitido durante su fabricación y gracias a los datos que le proporcionan los fabricantes con los que trabaja.
Una vez realizado el cálculo y el recuento total de la huella de carbono emitida por todos aquellos que están siendo utilizados en el momento por sus usuarios, la plataforma la compensa a través de la inversión en proyectos medioambientales como la reforestación o la limpieza de playas. Todos ellos emiten un certificado oficial de esta compensación.
De esta manera, Simplr no solamente favorece la reducción de la fabricación de bienes alargando su ciclo de vida, sino que, potenciando su reutilización, a partir de ahora logrará ahorrar las cantidades de CO2 generadas por ellos.
Por ejemplo, extendiendo la vida útil de un smartphone a 4 años y según cálculos de un informe publicado en 2019 por la European Enviromental Bureau, se pueden llegar a ahorrar 2,1 millones de toneladas de emisiones de CO2 por año, una cifra equivalente a retirar más de un millón de coches de las carreteras.
El modelo de consumo que propone la compañía ofrece a los ciudadanos la posibilidad de ajustar las compras a sus necesidades reales, así como de contribuir a la reducción de la huella de carbono que dejan en el planeta. Además, está totalmente alineado con los objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030: ODS 12, 13, 14 y 15.
En palabras de Ángel Bou, CEO & Co-founder de Simplr: «La economía de suscripción está demostrando que es una de las alternativas más eficaces para fomentar un consumo más responsable, sostenible y flexible. Sin embargo, todos los esfuerzos para contribuir a la descarbonización de la economía son pocos. Por eso, al modelo de consumo flexible que ya ofrecía Simplr, ahora sumamos el lanzamiento de esta iniciativa con la misma ilusión con la que en su momento fundamos la compañía. Queremos contribuir a reducir la huella de carbono pero, sobre todo, animar a los consumidores a que se unan a este nuevo modelo de consumo que ya no solo les permitirá llevar un estilo de vida más cómodo, sino que ahora también les ofrece la posibilidad de contribuir al cuidado del ecosistema».
Fuente Comunicae
