Pasado un mes de la invasión de Rusia en Ucrania, la crisis energética se acentúa y la inflación alcanza el 9,8% interanual; una escalada que no se repetía desde 1985. Ante estas cifras, Bookker, startup líder en soluciones para la gestión eficiente de espacios de trabajo, asegura que “nos encontramos en un momento clave para la transición energética y tecnológica”.
El despunte en el precio de la energía, que ya llevaba subiendo de manera paulatina en los últimos tiempos, está comprometiendo el tejido empresarial con diferentes repercusiones que incluyen la parálisis parcial o total de la actividad de algunas empresas.
Y es que, sin llegar a vislumbrar una recuperación de la crisis anterior, datos de la OCU nos indican que el precio de la electricidad durante el mes de marzo se dispara en el mercado mayorista hasta los 284,8 euros/MWh, un récord histórico, superando los 400 euros en algunos momentos y llegando al pico de 544,98 euros/MWh el día 7 de marzo.
En este nuevo contexto energético, el desarrollo tecnológico juega un papel protagonista y el dato parece ser un gran aliado: “Disponemos de mucha información a nuestro alrededor, el siguiente paso es utilizarla para generar beneficios. El potencial es abrumador”, afirma Miguel Ángel Orellana, CEO de Bookker.
En este sentido, las empresas que se acercan a Bookker buscan no solo gestionar sus espacios, sino la eficiencia y el ahorro que derivan de esta: “Hasta el momento los datos que barajamos son muy favorables, con mejoras en la eficiencia y productividad de las empresas superiores al 35%, y ahorros de más del 30% en todo lo relativo a real estate”, expone.
Respecto a las medidas estatales, el gobierno español ha propuesto un plan de choque para apoyar a familias y empresas, en materia de transportes, ciberseguridad y energía. Respecto a la última, se contempla, entre otras, la intervención en el precio de la luz, donde el recibo final oscilaría los 110 euros/MWh. De esta manera, se retomaría la media de 113 euros/MWh de 2021.
“Estamos en el punto de partida y todo suma”, explica el CEO de Bookker. “Las iniciativas estatales, los fondos Next Generation… Incluso, pequeños cambios en las dinámicas diarias”. Siguiendo con la línea del apoyo tecnológico, poner el foco en la gestión energética aparece como una herramienta necesaria en la mejora del ecosistema empresarial. “Lo fundamental es entender que para poder generar eficiencias, es necesario crear un entorno que las facilite”.