Las oposiciones se han vuelto en una opción laboral muy demandada por los españoles en los últimos años. La pandemia ha cambiado la vida de muchas personas, por ello, no es de extrañar que en los primeros 6 meses de 2022 hubo en España 30.307 trabajadores que dejaron su empleo, la cifra más alta jamás vista en España, según datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Pero ¿qué buscan ahora los empleados? Además, de buscar un ambiente de trabajo agradable, conciliación profesional y personal, un salario atractivo, muchos van en busca de la estabilidad laboral.
En relación con ello, tras el aumento de la demanda de opositores, el modelo de negocio de los SaaS educativos ha experimentado una transformación positiva y beneficiosa para las academias y opositores en los últimos años. Ahora, las academias ahorran mucho tiempo y, por lo tanto, dinero con los SaaS educativos.
En este sentido, ahorran tiempo preparando material. “Nuestras academias nos han confirmado que antes para configurar un test de 50 preguntas (con preguntas ya desarrolladas) tardaban aproximadamente 1 hora. Si querían hacer un test con distinto tipo de dificultad, esto supone leer más detenidamente y buscar entre más preguntas y tardaban entre 1,5 hora y 2 horas”, afirma Irene Chía, CEO de CazaTuPlaza.
Con plataformas como CazaTuPlaza, las academias no tardan ni un minuto en generar un test de los temas que quieran, indicando el número de preguntas que quieren que aparezcan de cada tema y nivel de dificultad. Esto supone un ahorro considerable de tiempo, recursos y personal.
Otra de las ventajas, es que también a la hora de corregir documentos, debido a que las leyes cambian constantemente, las academias solían tardar una media de 2 o 3 días en revisar todos los documentos y test en los que aparece la ley (por ejemplo) modificada y corregirlo. “Ahora, con nuestro buscador la hacen al momento y si un documento se repite en varios cursos se cambia en uno y automáticamente se corrige en todos”, recalca Chía.
Otro de los beneficios, es que desde los propios SaaS educativos se esfuerza también para que el estudio de los opositores sea óptimo y por ello, además de crear recursos motivadores para el aprendizaje, hacen que ese estudio diario sea afectivo ya que la plataforma aprende de cada usuario y pregunta según las necesidades de cada uno.
Pero además de todas estas ventajas centradas en la maximización del tiempo que suponen un ahorro económico, estos Saas educativos ofrecen una plataforma integral, de tal forma que los centros no tienen necesidad de contratar espacio en la nube, servicios de videoconferencia, mensajería o soporte. De esta forma, la capacidad de hacer cursos online les permite rentabilizar sus contenidos y generar nuevos ingresos sin tener gastos asociados. Además, cuentan con un CRM para el control de usuarios, pagos, notas, actividad… Esto reduce los tiempos de gestión y problemas administrativos. “Le damos la posibilidad de crecer, de planificarse diariamente y ser más efectivos. Y de no perder tiempo en cuestiones que no sean educativas y poco productivas para sus alumnos”, concluye Chía.