Invertir ahorros privados cuando no eres un experto siempre conlleva riesgos. Es complicado juntar un poco de dinero con el objetivo de rentabilizarlo y hoy en día, nos encontramos muchas opciones para conseguirlo. Pero ¿cuál es la mejor opción? Acciones, fondos de inversión, bitcoins… Surgen continuamente nuevos sistemas, pero desde coininvest quieren impulsar una fórmula clásica, fácil y barata de proteger nuestro patrimonio a riesgo muy bajo y alta rentabilidad, invirtiendo en metales preciosos, activos tangibles que no pierden su valor en el tiempo: oro o plata. Los expertos de la plataforma de compraventa de metales preciosos. coininvest.com nos dan las claves para acertar, advirtiendo de los errores que debemos evitar.
- Universalidad: El oro es una alternativa sencilla, ya que es un activo tangible a prueba de inflación, que no pierde su valor universal y que puedes intercambiar en cualquier parte del mundo.
- Adaptado a todos los bolsillos: Al enfrentarnos a una primera compra de metales preciosos con un presupuesto limitado lo más conveniente es hacerlo en presentaciones pequeñas; lo ideal, una moneda de una Oz (1515€).
- Garantía: Esta moneda debe haber sido acuñada por una refinería de prestigio o casa de moneda oficial, lo que nos garantiza su pureza, autenticidad, y valor en el mercado. Al ser monedas aprobadas por la LBMA, un inversor inexperto no repararía en si la refinería es o no conocida, o si lleva algún logo del distribuidor. Estas son circunstancias que afectan al valor, y a su liquidez.
- Analizar los valores: Porque la hora de venderla, la pureza no es tan relevante como su liquidez, porque no todas las monedas de oro son conocidas en el mismo grado en todo el mundo.
- Origen del metal: Por ejemplo, normalmente los lingotes de oro turco son más baratos que los lingotes suizos, sólo por el factor de liquidez. Y en monedas, otro buen ejemplo son la Filarmónica de Viena de oro vs la Corona de Oro 100. Ambas son monedas de Austria y ambas de oro. Sin embargo, la Filarmónica de Viena es reconocida en todo el mundo y se considera globalmente líquida. La Corona de Oro 100No tanto. Esto no significa que invertir en esta moneda sea una mala idea, siempre y cuando pagues menos de lo que pagarías por la Filarmónica.
- Mercado vs. Emoción: Otro error que debemos evitar es confundir el valor del mercado con el valor emocional. Porque hay monedas que traspasan la barrera de la inversión y se convierten en coleccionables; este factor emocional condiciona su concepción de inversión y de liquidez.
- Fluctuaciones bajas: Aunque tampoco debemos caer en el error de pensar que la compra de metales preciosos es igual que invertir en productos financieros. Los metales tienen fluctuaciones muy bajas y no están concebidos para especular, sino para proteger nuestro patrimonio con seguridad.
El reto es lograr el ahorro para disfrutar de unas finanzas personales saludables y, con ello construir, y proteger un patrimonio duradero que nos aporte la tranquilidad personal y familiar necesaria de cara al futuro. Según los expertos de coininvest, la mejor forma es realizar aportaciones periódicas a algún tipo de producto financiero, siempre adaptadas a nuestra capacidad económica real, que nos garanticen la mayor rentabilidad. Esto es precisamente lo que ofrece la inversión en metales preciosos, que además cuenta con otras ventajas como su portabilidad a cualquier lugar del mundo, y su confidencialidad; no existen muchas oportunidades de inversión que ofrezcan niveles tan altos de privacidad.