Según una reciente encuesta realizada por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), un 10% de las familias tienen serias dificultades para llegar a fin de mes haciendo frente a las necesidades básicas; de hecho, para un 6% resulta difícil hasta adquirir comida. Una situación que les impide afrontar el coste extraordinario que supone adquirir mascarillas con la suficiente frecuencia, lo que pone en riesgo su eficacia filtrante y, por lo tanto, la necesaria prevención del contagio del virus.
Y es que el uso continuado de mascarillas supone un coste mensual adicional para las familias de entre 24 y 105 euros, según el tipo de modelo que usen:
- 24 euros con mascarillas reutilizables (4 mascarillas a 6 euros la unidad).
- 60 euros con mascarillas higiénicas no reutilizables (120 mascarillas a 0,50 céntimos/unidad).
- 105 euros, como mínimo, si uno de los miembros pertenece a un grupo de riesgo (90 higiénicas a 0,50 céntimos/unidad, más 30 FFP2 a 2 euros/unidad).
Hablamos de un producto de primera necesidad y vital para mantener la salud pública, de ahí que OCU, a través de la campaña #mascarillasparatodos, solicite al Ministerio de Sanidad que:
- Facilite de forma gratuita un número suficiente de mascarillas a las familias en situación de vulnerabilidad económica. Así se hace ya en Castilla-La Mancha, independientemente del nivel de ingresos de las familias.
- Rebaje (y fije) el precio de todos los tipos de mascarillas. Por ejemplo, reduciendo el IVA del 21% al 4%, tal y como ya se hace en otros países europeos de nuestro entorno: Portugal lo tiene al 5,5%, Francia al 6% e Italia, temporalmente, al 0%.