MAPFRE está desarrollando un plan de progresiva reincorporación a las oficinas, que pondrá el foco en la seguridad de los empleados. Tras más de seis semanas en las que más de 30.000 empleados de la compañía en todo el mundo han mantenido el servicio a los clientes trabajando desde casa, MAPFRE ha activado una nueva fase del proceso, durante la cual parte de los empleados regresará a las instalaciones en las próximas semanas y meses, mientras que el resto seguirá trabajando en remoto. Esto supondrá que en los próximos meses la mayor parte de los empleados continuará desarrollando sus funciones en modalidad de teletrabajo.
Esta reincorporación se ajustará lógicamente a las circunstancias de cada país, se hará de forma escalonada, y tendrá como objetivo prioritario preservar lo más importante: la salud de los trabajadores, mediadores, colaboradores y clientes; velando especialmente por la protección de las personas vulnerables.
La duración del Plan se ajustará a lo que determinen las autoridades de cada país. Durante esta fase, denominada de Normalidad Transitoria, se van a establecer una serie de medidas de prevención y profilaxis destinadas a reforzar la seguridad de todos los empleados en sus puestos de trabajo.
Para garantizar, en la medida de lo posible, que la incorporación del personal se realiza en las condiciones sanitarias adecuadas, se desarrollará un protocolo sanitario en el que se evalúe la situación de cada empleado con respecto a esta enfermedad, y que se deberá aplicar previamente a la incorporación del mismo a las instalaciones.
En España, se mantiene de forma prioritaria la modalidad de trabajo en remoto a lo largo de esta fase especialmente a los siguientes colectivos:
- Trabajadores especialmente vulnerables a COVID-19.
- Empleadas embarazadas o con riesgo durante el embarazo.
- Empleados con hijos menores de 16 años o con hijos con situaciones especiales.
MEDIDA PARA ESPAÑA
En el caso de los más de 10.000 empleados de MAPFRE en España, el plan empezará a ejecutarse a partir del 11 de mayo de manera progresiva, inicialmente hasta el mes de septiembre, aunque su duración dependerá de la evolución de la pandemia y las condiciones que se vayan determinando. Ayer se ha firmado la ejecución del mismo con la representación legal de los trabajadores en España.