En la novena semana de alarma sanitaria, y con la entrada en la Fase 1 de desescalada en Euskadi, los datos de uso de los distintos servicios de telecomunicaciones van evolucionando en función de los nuevos hábitos y rutinas de la población, según arrojan las últimas actualizaciones realizadas por Euskaltel.
Euskaltel sigue con sus servicios de mantenimiento de red en continuo funcionamiento para asegurar la mejor calidad en las comunicaciones entre personas y empresas. 800 profesionales de Red y Tecnología de Euskaltel monitorizan en todo momento el tráfico y caudal de los datos para dimensionar la red en función de las necesidades y usos. Todo ello con el objetivo de proporcionar una buena experiencia de usuario, a las familias, las empresas y los servicios sanitarios y de emergencias.
La evolución del tráfico de telefonía y datos durante el estado de alarma arroja cifras que revelan cómo en las últimas semanas la población vasca ha ido paulatinamente dejando el confinamiento en sus casas conforme a los nuevos decretos que se han ido publicando.
El acceso a Internet arroja un incremento general del tráfico en hora pico del 71%, mientras que en acumulado el tráfico se ha incrementado por encima del 120% aumentando por la mañana el consumo de datos fijos motivado, en su mayor parte, por el teletrabajo. De todas formas, Euskaltel confirma cómo se ha notado en los últimos días un descenso del 15% en la utilización de acceso a Internet en esas horas pico – aquellas de mayor consumo de forma simultánea, de 12:00 a 14:00 y de 19:00 a 00:00 – por parte de las familias vascas, lo que denota que las personas ya han comenzado a salir a practicar deporte y a pasear o a trabajar. De asentarse este patrón de uso, confirmaría la tendencia de una vuelta hacia la normalidad.
La explicación del aumento de uso acumulado a lo largo del día reside en que las familias se conectan a la red de datos fija (mediante WiFi), en vez de móvil, para navegar por Internet, ver películas en streaming, celebrar videoconferencias con familiares o amigos, compartir juegos en red, o realizar teletrabajo.
En cuanto a la voz de móvil también aparece una débil reducción del 5% en las horas pico, mientras en el acumulado diario se ha incrementado un 120% (más del doble) respecto al periodo preconfinamiento, lo que se relaciona con el mantenimiento de las comunicaciones por parte de las personas con sus familiares y amigos.
El uso del whatsapp mantiene su crecimiento en un 300%, sin gran variación respecto a la anterior fase de confinamiento y las herramientas colaborativas de videoconferencia (Whatsapp, Skype, Teams, Zoom, etc.) han experimentado un crecimiento exponencial del 250%. Y en lo que a telefonía fija se refiere, ha experimentado un crecimiento del 90%.
Euskaltel ha constatado también que en estos momentos el consumo medio diario de Televisión es de 5,22 horas diarias, esto es, un aumento del 44% más de lo habitual, aunque es un punto menos que hace un mes, por efecto de los horarios de salida para pasear y jugar para los niños y sus familias establecidos ya en la Fase 0. Por otra parte, en global, los consumos de contenidos infantiles en televisión han crecido un 48%. Por edades, el consumo de TV infantil que más ha crecido es el destinado a menores de cuatro años, ya que se han multiplicaron por 9 sus registros habituales. En cuanto a consumo de televisión para mayores de 4 cuatro años ha crecido un 29% y un 54% en lo que a contenidos para preadolescentes se refiere.
Dimensionamiento continuo de la red y uso racional de los servicios
Los equipos de Sistemas y de Red del Grupo Euskaltel siguen trabajando para garantizar una red robusta y de calidad, para lo cual están dimensionándola continuamente para mantener los servicios de telecomunicaciones y asegurar una buena experiencia de uso. Se están monitorizando 24×7 los diferentes tráficos para identificar picos de uso superiores y lanzar las ampliaciones correspondientes.
La red de la compañía opera con total normalidad y está permitiendo estos elevados aumentos de tráfico sin incidentes destacados.
Esta situación tan extraordinaria pone en valor y confirma la importancia de la inversión en servicios de telecomunicaciones y en las infraestructuras de red que los soportan, las que ahora desempeñan un rol estratégico en la crisis sanitaria.