La Junta General de Accionistas de Banco Sabadell, celebrada por medios telemáticos y en la que ha participado el 61,57% del capital social, ha aprobado la gestión y las cuentas anuales del 138.º ejercicio social de la entidad y ha dado asimismo la conformidad a la propuesta de distribución de los 768 millones de euros de beneficios netos, obtenidos al cierre del ejercicio.
La junta ha acordado así distribuir un dividendo bruto por acción, con cargo al resultado del ejercicio de 2019, de 0,04 euros en efectivo por acción, de los que 0,02 euros fueron abonados como dividendo a cuenta el pasado 24 de diciembre y 0,02 euros serán abonados complementariamente, a partir del próximo día 3 de abril. Con ello, la retribución total para el accionista del ejercicio 2019 supone un payout de en torno al 40% y una rentabilidad superior al 7,5% según la cotización al cierre de hoy.
En el transcurso de la reunión, se han aprobado también los informes de Información no financiera y de Remuneraciones de los consejeros y el nombramiento de Mireia Giné como consejera independiente. Giné, que cubre la vacante dejada por Teresa Garcia-Milà, es doctora en Economía, tiene una brillante trayectoria académica en finanzas y gobierno corporativo, y también como creadora y directora de la Warton Research Data Services, la plataforma digital de datos financieros y aplicaciones para la investigación más importante del mundo. Su experiencia en el entorno digital y en el mundo de las fintech es una aportación importante para el Consejo de Administración de Banco Sabadell.
Intervención del presidente
En su intervención, el presidente Oliu se ha referido a los logros más importantes alcanzados en 2019 y ha expuesto su visión sobre la actual situación y el papel de la entidad en este difícil escenario. “Banco Sabadell -ha manifestado- ha conseguido culminar la transformación de su perfil de riesgo, tras el cierre de las ventas de carteras de activos problemáticos adjudicados desde la crisis de 2008, y ha superado definitivamente la crisis tecnológica de TSB.” Y, más adelante, ha destacado que el banco “ha cumplido el objetivo marcado de alcanzar una ratio de capital del 12%, y ha vuelto a la senda de normalización de los resultados, con un modelo de negocio que se ha demostrado potente y resistente a la complejidad del entorno”.
En cuanto al contexto general en el que nos hallamos como consecuencia de la crisis desatada por la pandemia del coronavirus, Josep Oliu ha señalado que “la principal preocupación del banco ha sido la de buscar soluciones públicas que con nuestro apoyo pudieran garantizar al mayor número de empresas el poder hacer frente a esta situación temporal de falta de solvencia y de liquidez”. Abundando en ello, el presidente ha manifestado que la entidad ha apoyado las medidas de avales a las empresas para cubrir pérdidas de este período de baja actividad. “Hemos defendido -ha dicho- la necesidad de estos avales para posibilitar que los bancos, inmersos en una regulación de requerimientos de capital crecientes, pudieran ser el instrumento de crédito y liquidez necesario sin poner en mayor peligro su solvencia.”
Oliu también ha afirmado que “los bancos afrontamos este nuevo reto con una solvencia muy diferente de la que teníamos en 2008 y con liquidez suficiente. Seremos, pues, fundamentales para poder ejercer el necesario ejercicio de análisis y determinación de las formas mediante las que las diferentes empresas o familias puedan pasar este bache”. En este sentido, ha concluido: “Banco Sabadell esta movilizado en la lucha contra el COVID-19, dando el servicio esencial para nuestra economía como es la continuidad de los sistemas de pago y de la viabilidad de los negocios.”
El presidente ha finalizado su intervención agradeciendo a la plantilla su esfuerzo y dedicación y el apoyo de los accionistas, y ha querido hacer también una especial mención a todos los profesionales de la sanidad: “Quiero -ha dicho- rendir un homenaje emocionado a todo el personal sanitario de nuestro país que, bajo riesgo de contagio, está sometido a horas y horas de tensión y de trabajo desbordado sirviendo a la sociedad.”
Intervención del consejero delegado
Jaime Guardiola, por su parte, ha focalizado su intervención en el repaso exhaustivo de la gestión social, la evolución de los negocios y las principales magnitudes del ejercicio. Al inicio de la misma se ha referido a la situación que estamos viviendo y, en este sentido, ha manifestado que “nuestra primera prioridad es proteger la salud de todo nuestro equipo y de todas aquellas personas con las que nos relacionamos”. Y ha añadido: “Más allá de garantizar que nuestra actividad y el servicio a los clientes siga prestándose con normalidad, estamos volcados en acompañar a las familias y las empresas en estos momentos complicados.”
Con relación al ejercicio de 2019, Guardiola ha dicho que ha sido “un buen año, en el que hemos generado un buen nivel de resultados y hemos robustecido nuestra posición competitiva y financiera”. Para él, el ejercicio se puede sintetizar en cinco hitos: “La mejora de la posición de capital; el descenso de los activos problemáticos; el fuerte dinamismo comercial en todos los negocios del grupo; la presentación del nuevo plan estratégico de TSB, la filial en el Reino Unido, y el sólido avance de la transformación comercial y digital.”
El consejero delegado se ha referido especialmente al buen comportamiento del negocio bancario fundamental, cuyos ingresos en 2019 ascendieron a 5.061 millones de euros. “A pesar del entorno marcado por los tipos de interés ultrabajos -ha afirmado-, hemos demostrado una enorme capacidad para generar ingresos ordinarios, gracias a una elevada actividad comercial y a una gestión activa de los precios. Durante los últimos años, estos ingresos han mostrado una extraordinaria resiliencia, y este es un dato especialmente remarcable en el actual contexto de tipos y demuestra la solidez del modelo de negocio de nuestra entidad.”
Según ha manifestado Guardiola, “el excelente desempeño comercial de todas las unidades de negocio del grupo ha permitido incrementar el crédito y los recursos durante el ejercicio”. Entre los numerosos datos que incluía el informe de gestión que ha presentado, puede destacarse que, al cierre de 2019, el 52% de las pymes y el 68% de las grandes empresas españolas eran clientes de Banco Sabadell; que el negocio de los clientes de banca corporativa fuera de España había crecido un 16%, y que el número de clientes digitales en España alcanzaba ya los 3 millones, un 6,2% más que el año anterior.
“De cara a 2020 -ha manifestado el consejero delegado-, el contexto es muy exigente. A los importantes retos inherentes al negocio bancario, se une ahora la incertidumbre sobre el alcance económico y social de la crisis global generada por la extensión del COVID-19, pero tenemos un firme compromiso con las empresas, con las familias y con la sociedad en general para estar a su lado y contribuir a superar esta crisis. Por eso -ha concluido-, vamos a seguir haciendo lo que llevamos haciendo desde 1881: acompañar a las personas y las empresas, anticipándonos y ocupándonos de sus necesidades, en los momentos positivos y también en los momentos complicados”.