España cuenta con, aproximadamente, 70.000 asesorías contables que prestan servicio al tejido empresarial más habitual en el país: las pequeñas y medianas empresas.
De hecho, desempeñan un papel crucial en la gestión financiera ya que suelen ser servicios externalizados, pero a veces cometen errores que pueden tener consecuencias negativas.
“Las asesorías son empresas que deben estar vivas y en constante aprendizaje porque los marcos legales y normativos cambian. Los errores suceden cuando la formación deja de ser continuada, cuando no se utilizan las tecnologías como aliadas para recordatorios o cuando no se invierte en cuidar los datos” explican desde M&M Asesores, una asesoría contable en Las Palmas de Gran Canaria, que dan servicio a algunas de las 28.800 pymes que operan en la isla.
¿Cuáles son los cinco fallos más habituales?
1. Falta de actualización normativa: Las leyes fiscales y contables cambian con frecuencia, y es fundamental que las asesorías contables se mantengan al día con las últimas regulaciones. No estar al tanto puede llevar a errores en la presentación de impuestos y declaraciones financieras.
2. Errores en la clasificación y registro: Clasificar incorrectamente las transacciones o cometer errores al registrarlas en los libros contables puede llevar a discrepancias en los estados financieros y a problemas con las auditorías, obligatorias cuando la empresa factura más de 5.7 millones de euros en su ejercicio o cuenta, entre otras cosas, con más de 50 trabajadores.
3. Falta de comunicación con los clientes: La comunicación efectiva entre la asesoría contable y sus clientes es esencial. No informar adecuadamente a los clientes sobre sus obligaciones fiscales o proporcionar asesoramiento oportuno puede resultar en multas o sanciones financieras. Basta revisar las cifras de Hacienda, que cerró su ejercicio 2022 con multas por valor de 30.000 millones de euros para entender que es vital la comunicación e información fluida.
4. No disponer de una correcta planificación fiscal: Una de las principales funciones de una asesoría contable es ayudar a sus clientes a optimizar su carga fiscal de manera legal. No considerar estrategias de planificación fiscal puede resultar en una factura de impuestos más alta de lo necesario. Ver posibles desgravaciones o cómo mejorar las cifras forma parte de su vertiente asesora.
5. Falta de seguridad de datos: La información financiera es sensible y debe manejarse con cuidado. La tecnología ha llegado para ayudar a la hora de cruzar la información y cifras, pero es clave que esté más que asegurada y que la asesoría invierta en la seguridad informática. No mantener la seguridad de los datos contables puede exponer a los clientes a riesgos de fraude, robo de identidad o pérdida de información confidencial.