Esta madrugada aterrizaba en el Aeropuerto Madrid-Barajas Adolfo Suarez el avión ABW9604 con un total de 300 equipos de respiración de última generación, donados por Iberdrola, con el fin de contribuir a reforzar la capacidad de respuesta de los servicios sanitarios frente al COVID-19.
Una vez en tierra, voluntarios de la compañía han colaborado en las labores de gestión del cargamento de respiradores, modelo Aeonmed VG70 (Intrusive Oxygen Ventilator), que en las próximas horas será distribuido a consejerías de Sanidad de Comunidades Autónomas para su reparto directo a centros hospitalarios.
Esta iniciativa forma parte de la acción global desarrollada por el grupo Iberdrola durante la crisis sanitaria del coronavirus y completa el proceso de entrega de material de primera necesidad, aprovechando su capacidad de acceso global a suministros, así como otras acciones solidarias realizadas en los últimos meses por valor de más de 30 millones de euros.
Desde el inicio de la pandemia, el grupo ha adquirido para su donación a las autoridades sanitarias y centros hospitalarios un total de 400 equipos de respiración -a los 300 que han llegado a España se suman 50 donados a Brasil y otros 50 distribuidos con anterioridad en España-; así como 4,6 millones de mascarillas, 120.000 buzos de protección y 20.000 gafas de protección; todo ello gestionado a través de los proveedores Iturri, Wottoline, Amara y Viral Health. En esta ocasión, la logística ha sido realizada por el grupo de transporte DSV.
PLAN DE ACCIÓN CONTRA LA PANDEMIA CON MÁS DE 150 MEDIDAS
La donación de material sanitario y de prevención, en coordinación con las autoridades, ha formado parte de la respuesta global del grupo Iberdrola contra la crisis sanitaria del coronavirus.
El grupo activó un plan de acción contra la pandemia, con más de 150 medidas, para proteger a sus trabajadores y proveedores, asegurar el suministro de su servicio esencial y atender las necesidades de colectivos y clientes más vulnerables.
Entre las acciones desarrolladas, la compañía reforzó el servicio energético de 350 hospitales e instalaciones medicalizadas durante el estado de alarma. Asimismo, coincidiendo con la irrupción del coronavirus y con el objetivo de contribuir a la recuperación de la economía y el empleo, decidió adelantar pedidos a proveedores por valor de 7.000 millones de euros en el primer semestre y elevar sus inversiones este año hasta los 10.000 millones de euros.
Iberdrola se ha convertido en la primera compañía en certificar a nivel mundial con AENOR su protocolo de actuación frente a la COVID-19. Este certificado avala sus actuaciones para hacer frente a la pandemia del coronavirus, garantizando tanto la seguridad y salud de las personas como el mantenimiento y la calidad del suministro energético.
MÁS DE 2.000 VOLUNTARIOS FRENTE A LA COVID-19
Desde que se decretó el estado de alarma, Iberdrola ha llegado a movilizar a más de 2.000 voluntarios en iniciativas solidarias en España. Bajo la campaña ‘Voluntarios frente a la COVID’, este colectivo de manera altruista y desde sus casas ha colaborado en 36 proyectos con 21 entidades sociales, que han beneficiado a más 12.000 personas de colectivos vulnerables.
Entre sus actuaciones han destacado la fabricación de mascarillas y máscaras protectoras realizadas con impresoras 3D, la organización de correspondencia virtual entre voluntarios y ancianos aislados en residencias, la donación de dispositivos electrónicos para mayores aislados en hospitales o residencias, el acompañamiento telefónico para personas con discapacidad o enfermedad mental y un ‘cuenta cuentos’ para niños y adultos con discapacidad intelectual.