Lidl sigue dando pasos adelante para crecer de forma sostenida y sostenible en Castilla y León. Tras aterrizar en esta región hace 28 años, la cadena de supermercados ejerce un rol clave como motor de creación de empleo, contribuyendo con ello a dinamizar el mercado laboral castellanoleonés. En apenas cuatro años, por ejemplo, Lidl ha incrementado hasta un 33% su plantilla en esta CCAA, o lo que es lo mismo: ha logrado crear unos 130 nuevos puestos de trabajo con los que ya suma un equipo de más 520 personas. En su compromiso con la creación de empleo estable y de calidad, ya son un 94% los contratos laborales de carácter indefinido que la empresa ofrece a sus empleados en este territorio.
Estas nuevas oportunidades laborales son fruto de la firme apuesta de Lidl por estar cada vez más presente en Castilla y León, donde en los últimos meses ha abierto las puertas de tiendas en localidades como Ponferrada (Avda. de Galicia, s/n) o Benavente (Avda. Federico Silva Muñoz, 68). Adicionalmente, sus perspectivas en esta región apuntan al crecimiento y buen ejemplo de ello es la reciente adquisición de una parcela de unos 158.000m2 en el municipio leonés de Villadangos del Páramo para construir una nueva plataforma logística que generará riqueza y empleo local y garantizará también su expansión sostenible en el noroeste de España.
Lidl, referente también en calidad de empleo
Con el objetivo de garantizar la estabilidad y la seguridad laboral de su plantilla, la compañía firmó el año pasado junto a los representantes legales de los trabajadores su III Convenio Colectivo propio. Éste, vigente durante el periodo 2022-2025, blinda avances significativos en los ámbitos de la retribución y los derechos sociales de sus empleados, situándose de nuevo como el marco laboral de referencia en el sector de la distribución en España.
Este nuevo convenio contempla, entre otras medidas, un incremento salarial de un mínimo de un 18% para más de 15.500 trabajadores de Lidl en el país durante cuatro años, pudiendo alcanzar hasta un 19% en función del IPC. Asimismo, y con el fin de poder mantener en todo momento el poder adquisitivo de su plantilla, la compañía incorpora por primera vez una cláusula de revisión salarial de hasta un 4% adicional al finalizar la vigencia de este convenio, en función también del IPC.
Más allá del ámbito retributivo, este marco laboral integra también medidas pioneras y poco habituales en el sector de la distribución en España como la consolidación de la semana laboral máxima de cinco días o la voluntariedad de trabajar en festivos.
Todo ello hace posible que Lidl haya sido reconocida con el sello Top Employer 2023, una distinción que acredita a las organizaciones más destacadas en el ámbito de la empleabilidad y la gestión de personas. La cadena de supermercados es además la única empresa del sector de la distribución en España que logra ser Top Employer por sexto año consecutivo.
La apuesta de Lidl por Castilla y León
Lidl cuenta actualmente con una red de 25 tiendas en Castilla y León, donde en su objetivo por incorporar cada vez más artículos regionales a su surtido ya compra producto (carnes, galletas o frutas y verduras, etc.) por valor de unos 290 M€ anuales a más de 40 proveedores. De todas sus compras en esta región, la empresa exporta hasta un 40% a sus más de 12.000 establecimientos en una treintena de países.
Gracias a su actividad, sobre todo su apuesta por los productos y los proveedores locales y la apertura de nuevos puntos de venta, Lidl ejerce un papel clave como dinamizador del mercado laboral castellanoleonés ampliando su propia plantilla y generando también puestos de trabajo para otras empresas. En este sentido, y tal y como se desprende de un estudio de la consultora PwC sobre el impacto corporativo de Lidl en España, la compañía ya es responsable de unos 7.400 puestos de trabajo en esta región (un 0,75% del total autonómico) entre directos, indirectos e inducidos.
Este último dato se explica teniendo en cuenta la plantilla de Lidl en Castilla y León (más de 520 personas) y las cerca de 6.900 oportunidades indirectas e inducidas que la empresa es capaz de generar en esta CCAA, alcanzando su impacto sobre el mercado laboral castellanoleonés cifras récord: por cada empleo directo que crea ya genera otros 13 de forma indirecta e inducida.
Asimismo, es especialmente relevante el creciente impacto de la actividad de Lidl sobre el PIB de Castilla y León: un 14% más en apenas tres años. Según el mismo estudio de PwC, la contribución de la cadena de supermercados a las arcas públicas de esta región logra también cifras récord tras acercarse ya a los 350 M€ anuales (un 0,66% del total autonómico).