Nacida en periodo de crisis, quizá por eso DESTINA se haya adaptado mejor a la situación actual, sin que haya sido necesario, hasta la fecha, ni siquiera poner en marcha ningún ERTE. En 2020, DESTINA es una empresa preparada para cumplir cualquier encargo, de cualquier magnitud, dentro del sector logístico, desde el transporte de mercancía convencional hasta el de mercancías clasificadas (ADR), pasando por el Almacenamiento de Productos Químicos (APQ)
En el año 2020, DESTINA LOGÍSTICA cumple una década desde el inicio de su actividad operativa. Nacida en una época difícil, en plena crisis económica, como una empresa austera, esta circunstancia ha marcado su trayectoria y su forma de hacer negocio.
Una evolución constante
DESTINA surgió de la unión de un grupo de emprendedores con amplia experiencia en el sector logístico, que vieron una oportunidad en la profesionalización del transporte de mercancía peligrosa (ADR) y su almacenaje (APQ) como la piedra angular del desarrollo de la compañía.
Con el propósito firme de prestar un servicio seguro, fiable y serio en este segmento del transporte y la logística, inició su andadura con tres trabajadores en nómina. En el primer quinquenio, el crecimiento neto de la compañía superó año tras año los dos dígitos. En 2012, la facturación ya se elevó hasta los cuatro millones de euros, habiendo llegado a rozar los 10 millones en 2018. Hoy día, DESTINA da empleo, de manera directa o indirecta, a cincuenta trabajadores.
Desde el primer día de su activación operativa, a comienzos de 2010, DESTINA no solo fue transporte y logística para sus clientes del sector químico. También prestó, como sigue haciendo a día de hoy, asesoramiento profesional en materia de transporte y almacenaje de un negocio tan complejo y estricto como es ese nicho de mercado. La empresa dispone de un departamento formado por consejeros de seguridad, técnicos de calidad y prevención de riesgos laborales que, partiendo de la normativa vigente, buscan la excelencia operativa de sus clientes.
En constante evolución desde el año 2010, DESTINA LOGISTICA ha añadido a sus líneas de trabajo de transporte y almacenaje de productos químicos y convencionales, la obtención de los Certificados de Alimentación Animal y Nutrición Humana y el Registro Sanitario de Alimentación Animal en sus todos sus centros de trabajo.
En 2020
En 2020, DESTINA LOGÍSTICA es una empresa preparada para cumplir cualquier encargo, de cualquier magnitud, dentro del sector logístico, desde el transporte de mercancía convencional hasta el de mercancías clasificadas (ADR), pasando por el Almacenamiento de Productos Químicos (APQ).
DESTINA LOGÍSTICA opera en toda la Península Ibérica e islas. Y, si la medida de la calidad la da la satisfacción del cliente, DESTINA LOGÍSTICA puede presumir de prestar servicio tanto a grandes multinacionales del sector químico, como a PYMES, con el mismo entusiasmo y dedicación.
Su red de corresponsales le permite asegurar un tiempo de entrega de la mercancía de entre 24 y 48 horas, siempre bajo las más estrictas medidas de seguridad.
Por su perfil de empresa sobria y seria, nacida en tiempo de crisis económica, DESTINA LOGÍSTICA está superando la pandemia, hasta la fecha, sin necesidad de recurrir a ERTES, conservando el 100% de los empleos y sin haber necesitado recurrir a líneas de crédito adicionales. “Somos, al mismo tiempo, una compañía líquida, porque nos adaptamos a las necesidades de nuestros clientes, y sólida, porque nuestro patrimonio y saber hacer avala nuestros proyectos”, afirma Vicente Calero, consejero delegado de DESTINA.
Por otra parte, y en la medida de sus posibilidades, la compañía logística madrileña ha mantenido, en todo este tiempo, un perfil solidario, apoyando diferentes causas sociales para devolver a la sociedad al menos una parte de lo que recibe de ella. DESTINA mantiene el patrocinio del equipo Camioneros de Coslada, formación con la que practican el deporte del Fútbol Americano más de 150 jóvenes de todas las categorías en la localidad del Corredor del Henares, y colabora o ha colaborado con distintos proyectos solidarios de lucha contra enfermedades como el cáncer, la parálisis cerebral infantil, o la catarata congénita.