Consum ha donado 1.223 toneladas de alimentos entre los meses de mayo y junio para ayudar a paliar los efectos de la crisis derivada de la Covid-19. Estas donaciones, que proceden del Programa Profit de la Cooperativa, se realizaron a diferentes entidades sociales, ONGs y comedores sociales de las poblaciones donde Consum está presente y tuvieron un valor de 3,14 millones de euros.
Esta donación de alimentos se suma a la realizada por la Cooperativa durante los meses de marzo y abril. La mayor parte de aquella donación correspondió también al Programa Profit, que alcanzó los 850.000 kilos de alimentos por valor de 2,5 millones de euros.
Además, Consum también activó un plan social junto con los bancos de alimentos de las provincias en las que opera, con una dotación de 150.000 euros, para la emisión de vales gratuitos que se entregaron a los bancos de alimentos para ser canjeados por alimentos y productos de higiene en los supermercados Consum y la franquicia Charter de las diferentes localidades.
Comprometidos con los demás
En 2019, Consum ha seguido colaborando con más de 450 proyectos sociales en todas las comunidades donde está presente, alcanzando a más de 194.000 personas, con un valor de 18,2 millones de euros en proyectos de colaboración solidaria, un 9% más que el ejercicio anterior, dentro de su política de responsabilidad social.
Dentro de dichas colaboraciones solidarias, destaca el Programa Profit de Gestión Responsable de Alimentos, en el que se enmarcan las donaciones realizadas por Consum durante todos los meses de la pandemia. Gracias a este Programa, durante el pasado ejercicio, la Cooperativa donó más de 6.900 toneladas de alimentos provenientes de los supermercados, plataformas y escuelas de frescos, por un valor de 17,9 millones de euros, un 8,1% más que en 2018. En el programa colaboran más de 1.000 voluntarios de 320 entidades, entre las que destacan Cáritas, Cruz Roja, comedores sociales y Bancos de Alimentos. De todo ello se beneficiaron más de 50.000 personas. Además, el aprovechamiento de los productos donados también supone un impacto ambiental positivo, ya que previene la emisión de 4.400 toneladas de CO₂ a la atmósfera que se producirían si estos alimentos se desperdiciaran.