Joan Armengou, propietario y Gerente de Centros SBC, explica cómo desde que el Gobierno decretó el Estado de Alarma, han estado trabajando en la adaptación de sus centros para garantizar a sus usuarios un lugar de trabajo libre de COVID-19.
“Nuestra prioridad fundamental ha sido, desde el primer momento, proteger la salud de nuestros clientes y empleados siguiendo con la máxima atención las indicaciones y recomendaciones de las autoridades sanitarias” comenta Armengou.
En primera instancia, a nivel operativo ofreciendo servicios en formato online “en remoto” para todos los clientes que han optado por el teletrabajo desde sus domicilios. En segundo lugar, atendiendo presencialmente a las empresas que desarrollan actividades consideradas esenciales y que han requerido seguir acudiendo a sus despachos durante el confinamiento. Y, por último, y en la medida que se van relajando las restricciones, recibiendo cada día a un mayor número de empresas que se están reincorporando a sus lugares de trabajo.
“Con estas alternativas, nuestros Centros han permanecido accesibles y totalmente operativos, en cada una de las circunstancias, para ofrecer a todos nuestros clientes una infraestructura para seguir desarrollando su actividad con la máxima seguridad y el mínimo riesgo de contagio” comentan.
Medidas específicas en los Centros SBC desde la declaración del Estado de Alarma
El primero, es un protocolo de higienización para el personal de limpieza, que añade a las rutinas habituales formas de proceder específicas para eliminar el COVID-19 de aquellos lugares y superficies donde hay más posibilidades de contagiarse. De forma adicional, incorporando máquinas de filtración HEPA, con producción de Ozono y Aniones para eliminar virus y bacterias. Estas unidades de depuración se ponen en funcionamiento el tiempo recomendado para que su uso sea efectivo y resulte inocuo para las personas.
El segundo, es un Protocolo de hábitos de comportamiento tanto para el personal propio como para clientes. Esta actuación se concreta en la concienciación constante de las formas de proceder, de la corresponsabilidad y del mínimo riesgo en la interacción entre todos los usuarios que acuden al Centro de negocios. Centros SBC son fundamentalmente despachos privados de uso exclusivo, no los conocidos Coworking donde los usuarios trabajan en espacios comunes y compartidos. De ahí la especial atención que se pone en proteger las zonas de paso y minimizar el contacto en las zonas comunes.
“Nuestros clientes han acogido con satisfacción estos nuevos roles participando activamente en esta nueva forma de trabajar que necesariamente tendrá que permanecer unos meses. Esta sensación les ayuda a sentirse mejor, más protegidos, y pueden concentrarse en recuperar sus rutinas de trabajo”.