Las bodas se adaptan a las nuevas generaciones, en concreto la de los Zetas, que entran pisando fuerte en el panorama nupcial. El día más romántico para una pareja trae cambios de la mano de la generación más joven que empieza a pasar por el altar: los nacidos a partir de 1995, también conocidos como zoomers.
Los primeros Z ya tienen alrededor de 27 años y una parte de ellos empieza a darse el ¡sí, quiero! Aunque la edad media para casarse en España es de 34 años, según el Libro Imprescindible de las Bodas, publicado por Bodas.net en colaboración con el profesor de ESADE, Carles Torrecilla, y Google, muchas parejas de esta generación ya se han casado o han empezado a organizar su gran día. Es el caso de las influencers Marta Lozano y Teresa Andrés, el futbolista del Atlético de Madrid, Marcos Llorente, o el concursante de la Isla de Las Tentaciones, Hugo Pérez, que darán el ‘sí, quiero’ en los próximos meses.
La tecnología, la sostenibilidad y un protocolo menos formal, son tres conceptos que permiten entender estas nuevas bodas. La web nupcial líder en España, Bodas.net, ha realizado una encuesta a más de 3600 novios y novias de la generación Z y millennials para saber cómo son este tipo de bodas y si los gustos y diferencias entre generaciones empieza a verse reflejado en un día tan importante.
Cómo se conocen las parejas de la generación Z: Instagram se abre paso
Ambas generaciones se conocen todavía en sitios muy similares, aunque para la generación más joven sigue siendo más frecuente conocer a su pareja principalmente a través de amigos. Esto se debe a que sus círculos y su vida social todavía es mucho más activa y conforme se van cumpliendo años este círculo se va reduciendo, por lo que es más probable conocer a la pareja en el trabajo o a través de Internet. Un aspecto llamativo, es que lo de ligar en los bares y discotecas va en descenso: para los millennials representa el 14.5%, mientras que para los Z solo el 9.4%.
De las parejas que se conocen a través de Internet, para los millennials el principal sitio son las apps de citas y, aunque para los Z también son un medio importante, Instagram se abre paso de una forma mucho más amplia que para sus antecesores. Un 13% afirma haberse conocido a través de esta red social, mientras que para los millennials Instagram supone únicamente el 3.8% de los casos.
Bodas conectadas en las que la tecnología es imprescindible
La generación Z es digital por definición. Tal vez nunca escucharon cómo sonaban los primeros módems, pero se mueven como pez en el agua en TikTok e Instagram. Esta hiperconectividad que los caracteriza explica que 9 de cada 10 parejas recurran a Internet a la hora de coger ideas para su gran día o que 7 de cada 10 jóvenes que están planeando su boda tengan pensado compartir una parte de este día en sus redes sociales, según el Libro Imprescindible de las Bodas.
Además, según una encuesta de Bodas.net, se confirma que los zetas están más preparados para organizar una boda digitalmente. Ante la pregunta sobre la importancia que le dan a ciertas herramientas de planificación de bodas, en todos los casos los más jóvenes les otorgan una mayor relevancia. Así lo muestra este gráfico.
Las principales diferencias entre las bodas de los Z y los millennials
Además del aumento en el uso de la tecnología también hay otras diferencias entre las bodas de los centennials y millennials:
- La despedida: La generación zeta también es la que apuesta por una despedida de soltero o soltera diferente a la tradicional. Esta nueva generación prefiere una despedida con un grupo más reducido que los millennials. Un 57% de los centennials prefiere que sea un grupo íntimo de 5-6 personas, mientras que el 53% de los millennials quiere una celebración con muchos amigos.
- El mes favorito: Junio se corona, por el momento, como el mes preferido de esta generación y octubre pierde relevancia, mientras que para los millennials este último era un mes importante de bodas, según el Libro Imprescindible de las Bodas.
- El presupuesto: La generación Z tiene una previsión de gasto algo menor que los millennials. Esto puede deberse a la tendencia de realizar bodas con un número un poco más reducido de invitados en las que los compromisos no tienen cabida. Aunque los millennials ya habían empezado a prescindir de los compromisos, en el caso de los zetas baja aún más. La mayoría de los zoomers encuestados afirma que no contará con compromisos o compañeros de trabajo en este día tan especial. Habrá que ver si finalmente esta previsión de gasto se ajusta al presupuesto final, aunque esta variación no llega al 10% de media, según el Libro imprescindible de las Bodas.
- Los imprescindibles del día B: Para ambas generaciones la comida y la bebida de primera calidad, el vestido y la música y la diversión son los aspectos más importantes para ese día. Sin embargo, hay una diferencia clara en el tema de la sostenibilidad: se vuelve más relevante para los Z. En el caso de los millennials, un 44.8% afirma que es importante o muy importante, mientras que esto sube al 52.9% en los zoomers.
- El papel de las mascotas: Los Z quieren a sus mascotas en el día B. Entre las parejas encuestadas que contestaron que sí tenían mascota, el 43% de los millennials dijo que quería que su mascota participara en la boda, mientras que para los zetas el porcentaje sube hasta el 54.1%. La principal diferencia entre ambas generaciones es el papel que le otorgan a este amigo tan especial: el 43% de los zetas quieren que sean los portadores de las alianzas, mientras que para los millennials el principal papel será estar presente en el reportaje fotográfico, con un 37.6%.
Aunque en la actualidad los cambios todavía no son tan notorios debido a que estamos hablando de edades que hacen de puente entre los millennials y los zetas, es decir, de generaciones colindantes de edades muy similares, ya hay algunos puntos en los que se empieza a ver diferencia. Unas tendencias que empiezan a marcar el camino de cómo serán las bodas para esta nueva generación.