Este tipo de financiación cada vez resulta más relevante al permitir financiar proyectos completos en menos de una semana. Las nuevas tecnologías han abierto mercados típicamente tradicionales a un porcentaje de la población mucho más amplio. Los promotores tienen la opción de acceder a capital de una manera diferente y con un objetivo de retorno distinto gracias al crowdfunding
Cada vez más personas miran al futuro y deciden innovar en la manera en la que invierten su dinero. Hace tiempo, las opciones que tenían los ciudadanos de a pie para invertir eran muy limitadas, pero desde la aparición de las plataformas de ‘crowdfunding’, estas barreras se han difuminado poco a poco, hasta prácticamente dejar de existir.
Esta práctica está revolucionando uno de los sectores más tradicionales como es el inmobiliario. Hasta la aparición de las plataformas de crowdfunding, pedir un préstamo o una subvención, por ejemplo, eran las principales vías para poder financiar un proyecto inmobiliario. Del mismo modo que solo podían invertir en estos proyectos inversores con grandes capitales. Sin embargo, la llegada de las plataformas de financiación participativa (PFP) ha permitido democratizar el acceso a las altas rentabilidades del mercado inmobiliario institucional, y para ello, la tecnología es clave. Según Rafael Merry del Val, presidente de wecity.io, plataforma de financiación participativa, “la tecnología está democratizando las opciones de invertir de los pequeños inversores. Esta plataforma es rápida de usar, cuentan con una interfaz sencilla que muestra la información necesaria para el inversor para que a un golpe de vista decida si la inversión se adapta, o no, a lo que realmente está buscando”. Por tanto, comienza a prescindirse de la tradicional intermediación financiera y a poner en contacto a promotores de proyectos que demandan fondos mediante la emisión de valores y participaciones sociales, con inversores tradicionales u ofertantes de fondos que buscan en la inversión un rendimiento y rentabilidad para su dinero.
¿Cuáles son las claves del éxito del ‘crowdfunding’ inmobiliario frente a la inversión tradicional?
Este tipo de financiación ofrece una serie de ventajas tangibles a corto plazo para el sector como, por ejemplo:
- Marco regulatorio: Invertir en plataformas autorizadas por la Comisión del Mercado de Valores y por el Banco de España, como en el caso de wecity.io, otorga al inversor un marco añadido de confianza. Ambas instituciones supervisan la plataforma pero no las oportunidades, un trabajo de supervisión que recae sobre el equipo de especialistas de las plataformas.
- Acceso a inversores desde 500 euros: Se facilita el acceso a inversores desde 500 euros, además de darles la oportunidad de elegir los proyectos que mejor se adapten a su estrategia de inversión así como a sus planes de futuro.
- Rentabilidad más alta en menos tiempo: Los beneficios pueden ser a corto, medio y largo plazo, en función de la estrategia del inversor, lo que le permite obtener rentabilidades desde los 6 a los 24 meses. Rafael Merry del Val, presidente de wecity.io, asegura que “el poder obtener un beneficio en un plazo menor del habitual resulta atractivo para todo tipo de inversores, sean o no expertos”.
- Diferentes planes y tipos de rentabilidad adaptable: wecity.io permite diferentes tipos de retorno para el dinero. Algunos proyectos, sobre edificios locales, permiten una rentabilidad de tipo renta, mientras que otros edificios de vivienda, pueden permitir obtener el beneficio como plusvalía. El inversor es el dueño total de sus planes de rentabilidad.
- Ventajas fiscales y menos papeleos. Las inversiones en proyectos con financiación participativa se caracterizan por su simplificación fiscal. Quienes invierten en la compra de una vivienda de forma convencional, tendrán que hacer frente a los siguientes impuestos:
- IVA: En el caso de la vivienda nueva se paga el 10% de IVA al que se añade entre el 0,5% y el 1,5% del precio de compraventa en concepto de AJD, si la operación se realiza con hipoteca.
- ITP: En caso de una vivienda de 2ª mano se debe pagar este impuesto que oscila entre el 6% y el 10% en función de cada Comunidad Autónoma.
Al pago de estos tributos, es necesario añadir una serie de gastos fijos como Registro de la Propiedad, gastos de gestión, notaría y gestoría.
Además, la tributación, al invertir como persona física, se aplica al tipo marginal de la declaración de la Renta como rendimientos de capital mobiliario. Esto significa que los tramos de impuestos de crowdfunding serían:
- 6.000€ o menos, la tributación es del 19%
- Entre 6.000€ y 50.000€, la tributación es del 21%
- 50.000€ o más, la tributación es del 23%
Por tanto, al invertir a través de un crowdfunding inmobiliario, adquiriendo una participación de uno o varios inmuebles, se elimina toda la burocracia, además de evitar el riesgo de la poca diversificación, que supone la inversión en uno único activo inmobiliario.
- Diversificación: Invertir significa asumir riesgos, pero en el caso del crowdfunding inmobiliario, éstos se minimizan por la posibilidad de diversificar la inversión y porque empresas como wecity.io, realiza una preselección de proyectos por parte de un comité de expertos con más de 50 años de experiencia acumulada en el sector inmobiliario. De esta forma, los inversores pueden tener la tranquilidad de que los proyectos son estables y con los riesgos minimizados. Además, en el caso de wecity.io, como reconoce Antonio Mañas, CEO de wecity.io “realizamos un estudio del promotor y de los inmuebles, visitándolos y haciendo una Due Dilligence de la oportunidad apoyada por las valoraciones de mercado”.
Quienes optan por invertir únicamente en un inmueble, pueden tener pocas probabilidades de recuperar y rentabilizar como esperaban esa inversión, pero no solo eso, ya que puede ser necesario realizar reinversiones periódicas, gestiones, gastos asociados como impuestos municipales, mantenimiento, así como llevar a cabo una gestión directa con el arrendatario, la comunidad de vecinos, hacer frente a arreglos o reparaciones en caso de desperfectos.
Por el contrario, invertir a través de una PFP, autorizada por la CNMV y Banco de España, como es el caso de wecity.io, que cuenta con su equipo de profesionales detrás, hace que todos estos riesgos se diluyan y ofrece la posibilidad de realizar otras inversiones.
- Amplio mercado de proyectos: Invertir mediante las plataformas de crowdfunding inmobiliario da la posibilidad de hacerlo en diferentes tipos de proyectos y activos inmobiliarios, siempre en los mejores enclaves de las ciudades tanto de España como del resto de países.
- Más seguridad y transparencia: El inversor es el dueño absoluto sobre cómo y dónde invierte su dinero. Plataformas de inversión como wecity.io ofrecen una transparencia total sobre el destino de la inversión, así como qué está pasando con los proyectos donde se ha decidido invertir. De esta forma, el inversor puede planificar su futuro con más seguridad y tranquilidad.
Sobre Wecity
wecity es una plataforma de financiación participativa (PFP), autorizada por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y Banco de España que pretende democratizar el acceso a las altas rentabilidades del mercado inmobiliario institucional.
Fundado en 2020 por Rafael Merry del Val, José Navarro y Antonio Mañas, wecity busca oportunidades de inversión en los ámbitos de la vivienda, el retail o la logística a través de la alianza con sponsor-promotores que impulsen proyectos orientados a la renta o a la plusvalía, a los que aportará liquidez y el conocimiento del equipo de analistas de la plataforma.
Fuente Comunicae