Las importaciones de crudo a España se situaron en los 4,81 millones de toneladas en el mes de febrero, lo que representa una caída del 1,9% con respecto al mismo mes del año pasado, según datos de la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (Cores).
En el mes se importaron 28 tipos de crudo originarios de 18 países, siendo Brasil, con 768.000 toneladas y 16,0% del total, el principal suministrador de crudo a España en febrero, con un aumento interanual del 180,8%.
México se erigió en el segundo suministrador al país, con 496.000 toneladas y el 10,3% del total, mientras que Irak fue el tercero, con 416.000 toneladas y el 8,6% del total, aumentando sus importaciones un 16,4% y un 51,0% respectivamente frente a febrero de 2022.
Asimismo, este mes se importó crudo procedente de Ecuador, con 148.000 toneladas y el 3,1% del total, por primera vez desde octubre de 2014.
Por su parte, las importaciones de crudo de los países miembros de la OPEP cayeron en el mes un 17,5% con respecto al mismo mes de hace un año y representan el 36,5% del total. Destacaron los descensos interanuales de las importaciones de Arabia Saudí, Nigeria y Libia, así como los incrementos de Argelia y Angola.
Por su parte, aumentaron en el mes las entradas de crudo de los países No-OPEP, con un crecimiento del 10,1% con respecto a febrero de 2022, que representan el 63,5% del total.
Por áreas geográficas, América Central y del Sur, con un crecimiento del 355,5%, fue la principal zona de abastecimiento en el mes -el 25,9% del total-. Le siguieron África, que cayó un 16,7% pero representa el 24,8% del total; América del Norte, que creció un 6,1% y supuso el 23,4% del total; y Europa y Euroasia, que descendió un 52,5% y fue el 14,2% del total.
EUROPA PRESS