La startup agrotech Ixorigue, nacida en el pirineo aragonés (Benasque) y con sede en Madrid, dedicada a la sensorización de ganado extensivo mediante collares inteligentes y Big Data, ha cerrado una ronda de inversión de un millón de euros, que llega con el objetivo de liderar un mercado potencial de 350 millones de reses entre Europa y Latinoamérica.
Esta ronda de inversión ha sido apoyada por gran parte del accionariado actual, compuesto por Barrabés.biz, HEMAV, Escarpinosa (asociación de propietarios y ganaderos del Monte de Estós, en Benasque), la asociación sin ánimo de lucro Épsilon Ecología, Abadía de Collado Hermoso (sociedad de inversión patrimonial de Salvador García-Atance), Ignacio Vallejo-Nágera (CEO) y Adrià Martínez Mayor (CTO).
Se suman en esta nueva inyección de capital el fondo Finaves, gestionado por IESE Business School, inversores de la red de Business Angels de IESE y de ESADE, la empresa de electrónica Araelec (proveedor de componentes electrónicos de Ixorigue), la empresa Desarrollos Agro Intensivos y los inversores Antón Arriola (ex Consejero Delegado de Goldman Sachs en España, patrono de la fundación BBK y Consejero de Sherpa.ai) y Borja Moreno de los Ríos (venture partner de FJ Labs y CEO y cofundador de Merlin, marketplace de trabajo temporal en NYC adquirido por Commure en 2020).
“Queremos agradecer a todos nuestros inversores, tanto a los que han participado de nuevo como a los recién llegados, la gran apuesta que hacen por Ixorigue y que va a servir para potenciar el desarrollo de producto (software y hardware) y el equipo comercial, pudiendo así consolidar la posición de la compañía en España y apoyar su expansión internacional” ha señalado Ignacio Vallejo-Nágera, CEO de la compañía.
Para el líder del proyecto, “la ganadería extensiva es esencial para lograr una producción sostenible desde el punto de vista medioambiental ya que el pastoreo asegura el mantenimiento de terrenos fértiles, permite la captación y secuestro de carbono en el suelo y minimiza el consumo de agua, de complementos alimentarios y la contaminación por nitratos provenientes de los purines. Incrementar la rentabilidad de este modelo de ganadería es nuestra máxima prioridad y la oportunidad es inmensa, tanto por el volumen de ganado como por la limitada innovación hasta la fecha”.
La solución tecnológica de la empresa, que se basa en big data e inteligencia artificial, dispone de un collar inteligente que recopila información de localización y actividad de cada vaca que lo lleva puesto. Esta información es procesada, ordenada y enviada a la nube mediante redes de bajo consumo, bajo coste y largo alcance, idóneas para dispositivos IoT en entorno rural (redes NB-IOT y LoRaWAN). Una vez que la información llega a la nube, gracias a la aplicación de algoritmos, se pueden identificar situaciones tales como celo, preñez, parto, enfermedad, extravío o muerte.
Los ganaderos cuentan con un área privada con todos los detalles de su explotación donde pueden ver en todo momento dónde y cómo está su ganado, recibiendo además alertas por la propia plataforma y por Whatsapp en caso de que se detecte alguna anomalía.
“Mayor rentabilidad, mejor calidad de vida del ganadero y mayor trazabilidad del ganado en todo momento son los principales beneficios del uso de nuestra solución” asevera Vallejo-Nágera, quien añade que, además, “la solución está construida de forma que sea sencilla de utilizar, económica y duradera”.