El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha animado hoy a acudir a las llamadas a la vacunación contra el Covid-19 “no sólo como un acto de inteligencia”, sino también “de generosidad con todas las personas que viven en nuestro entorno”. Así lo ha apuntado tras recibir su primera dosis en el Edificio Multiusos Sánchez Paraíso, de Salamanca capital, donde estaba convocado de acuerdo a su año de nacimiento.
Tras aguardar la correspondiente cola para la inoculación, el presidente ha agradecido especialmente el trabajo de todas las personas, desde sanitarios a voluntarios, que hacen posible que la vacunación avance a buen ritmo en Castilla y León. De hecho, ha señalado, más de 975.000 personas ya han recibido al menos una dosis y superan las 595.000 las que ya tienen la pauta completa. Y la Comunidad encabeza el ránking de inmunizados entre los mayores de 60 años.
“La vacunación es la puerta abierta a la esperanza para recuperar nuestras vidas con normalidad, para recuperar la actividad económica que consideramos imprescindible”, ha recalcado Fernández Mañueco, quien ha reclamado que para el avance en la lucha contra la pandemia es imprescindible contar con más dosis.
Menos hospitilizados
“No sólo necesitamos más vacunas, agilidad en el suministro, sino también certidumbre y cómo actuar con la vacunas”, ha reclamado el jefe del Ejecutivo autonómico al Gobierno de España. “Tenemos capacidad de vacunar a más gente en Castilla y León. Si nos suministra el Gobierno más vacunas, podremos vacunar a más gente”, ha recalcado Fernández Mañueco, quien ha incidido en que es responsabilidad del Ejecutivo central.
“Cuando vacunamos lo que estamos haciendo es recuperar lo antes posible nuestra vida y también apostar por una reactivación económica desde la seguridad sanitaria”, ha subrayado el presidente de la Junta de Castilla y León.
Como prueba de la importancia de la vacunación, Fernández Mañueco ha resaltado dos datos. Por un lado, que desde que se intensificó la inoculación a finales de enero, la hospitalización por Covid-19 ha bajado un 90 por ciento. Por otro, que los fallecidos entre los contagiados han descendido un 85 por ciento en este periodo.