ABANCA amplía la donación de equipos sanitarios al Servizo Galego de Saúde (Sergas) para hacer frente a la crisis ocasionada por la COVID-19. La entidad financiera acaba de adquirir siete equipos de monitorización central dirigidos a gestionar, de una manera más eficiente, el eventual incremento de pacientes que se pueda producir en los hospitales gallegos.
Cada central que se instala lleva asociada dos estaciones de trabajo, a través de las que los servicios médicos operan los datos de la central. Las estaciones pueden ser colocadas en puntos distintos de los hospitales. Han sido instaladas en los hospitales de Vigo (Álvaro Cunqueiro); de Lugo (Lucus Augusti); de Ferrol (Arquitecto Marcide); de Pontevedra, y del Barbanza (Ribeira). En los próximos días entrarán en funcionamiento en los hospitales de A Coruña y de A Mariña (Burela).
La compra de estos nuevos equipos, de última tecnología, ha sido acordada con el Sergas, y responde a las necesidades del sistema sanitario. La experiencia adquirida en la fase más crítica de la pandemia reveló el importante desafío que supone la monitorización continuada de un colectivo amplio de pacientes con equipos profesionales ajustados. La función de esta dotación tecnológica suple esta limitación, ya que permite monitorizar de manera simultánea hasta 1.200 pacientes.
Los equipos de monitorización central facilitan generalizar las medidas que se adoptan, sin perder el seguimiento individualizado de cada paciente y tomar decisiones más ágiles. Esto es especialmente relevante porque mejora la eficiencia de los equipos médicos, al simplificar tareas y liberar tiempo a los profesionales de la primera línea de respuesta. La monitorización central permite seguir y documentar indicios de deterioro de manera más óptima, y reduce el riesgo de suministrar exceso de oxígeno y de generar falsas alarmas de arritmia.
La compra de estos siete equipos de monitorización central se suma a las donaciones de tecnología que ha realizado ABANCA al Sergas para las siete áreas sanitarias de Galicia. El banco anunció a finales de marzo la donación de 150 unidades de cuidados intensivos, una compra que durante el mes de abril se incrementó con 364 dispositivos más. Este segundo lote incluyó monitores multiparamétricos, monitores de constantes vitales, desfibriladores y ecógrafos de alta prestación, para así dotar a las UCI de los hospitales gallegos de todo el material necesario para la atención al paciente. En mayo, la entidad financiera sumó cuatro lectores clínicos capaces de analizar 25.000 test diarios de COVID-19.