Tras la finalización del estado de alarma y los avances hacia la normalización de las actividades económicas, algunas marcas deberían replantearse su posicionamiento, para ajustarlo a la nueva situación y a las consecuencias que la crisis sanitaria haya provocado en su percepción
La llegada de la llamada ‘nueva normalidad’ es un punto de inflexión para muchas marcas, que deben gestionar su imagen, la percepción de sus públicos objetivos, el valor que le confiere la audiencia y a qué experiencias se ligan sus productos y servicios. Cuidar el branding es un aspecto primordial para los negocios, pero en una situación como la generada por la crisis sanitaria del Covid-19 y la post-crisis, especialmente. Por ello, la época estival puede ser el momento idóneo para realizar un reposicionamiento, de cara al próximo otoño. Avance Comunicación, agencia de servicios de marketing estratégico y comunicación corporativa analiza las principales claves para el desarrollo de una consultoría de marca.
«Una consultoría de marca tiene como objetivo la creación o replanteamiento y gestión del branding de una empresa. Para ello, es necesario centrar el trabajo en la definición clara de la imagen que se pretende proyectar, en la construcción de dicha imagen y en la implementación de las diferentes acciones que contribuyan a su difusión y refuerzo», ha afirmado Noelia Perlacia, socia y DIRCOM de Avance Comunicación.
Qué funciones desarrolla una consultoría de branding
Una consultoría de branding o de marca ayuda crear y gestionar la imagen que proyecta la empresa. Para ello, se debe elegir un posicionamiento diferenciador, respecto del resto de entidades del mismo sector.
Según Jorge González, socio y director creativo de Avance Comunicación: «Mediante una consultoría de branding se desarrollará una estrategia de marca que contribuya, de forma activa, a lograr el posicionamiento buscado. Para ello, previamente, debe realizarse un análisis apropiado. Se trata de que el público asocie la marca a una serie de valores o experiencias positivas».
Según los responsables de la agencia, si la empresa ya dispone de una marca construida con anterioridad, de estudiarse su actual posicionamiento recurriendo a una auditoría. «Ese es el momento de determinar si se han tomado las decisiones correctas o si, por el contrario, es conveniente redefinir algunos de sus conceptos», afirman.
Las principales funciones de un proceso de consultoría de marca son:
La creación de una identidad tanto visual como verbal.
La proyección de la arquitectura de marca, con el fin de adaptar el branding a los productos y servicios que se lancen al mercado.
La reposición de la marca según las etapas a las que se enfrente el negocio.
La potenciación del branding a nivel interno, para que los empleados de la empresa sean sus mayores embajadores.
El diseño de los diversos soportes de comunicación, packaging, elementos promocionales, etc. que sean siempre fieles a la estrategia ideada.
Cuando la empresa haya culminado este proceso de creación de la marca y su posicionamiento, deberán estar establecidos sus objetivos estratégicos. Las decisiones que se tomen a partir de ese instante deberán ser coherentes.
¿Cuándo es necesario recurrir a una consultoría de marca?
Según los responsables de Avance Comunicación, cualquier momento es idóneo para realizarla, ya que derivará en diversos tipos de beneficios para la empresa. Es una buena opción cuando se desea dar un giro de timón al negocio.
Asímismo es recomendable recurrir a una de estas consultorías si la entidad sufre algún tipo de crisis, tanto económica como de imagen. La reputación es vital para todas las firmas. Si esta se ve dañada, urge solucionar el problema cuanto antes.