ABANCA ha activado con carácter urgente un plan especial de crédito destinado a ayudar a las empresas y familias a mitigar el impacto de la pandemia por COVID-19. El ‘Plan Anticipar’ del banco se dirige fundamentalmente a las empresas, pymes, autónomos, negocios y comercios, para los que moviliza 7.900 millones de euros en líneas de liquidez, y al segmento de clientes mayores, un colectivo especialmente vulnerable ante esta emergencia de salud, que podrá cobrar su pensión de forma anticipada a partir del día 24.
ABANCA ha activado distintas líneas extraordinarias para apoyar al tejido empresarial afectado por la expansión del nuevo coronavirus y ayudarle a afrontar las necesidades de financiación motivadas por esta situación excepcional. ABANCA pone a disposición de más de 6.000 pymes y empresas clientes, de forma inmediata, más de 1.700 millones en crédito para aportarles liquidez extra que les permita atender potenciales contingencias en su tesorería y atender sus compromisos de pago (nóminas, proveedores…) durante las próximas semanas y meses. El principal objetivo es ayudar a preservar el empleo. Paralelamente, se ofrecen créditos por importe de más de 4.400 millones, preconcedidos de manera automática, con una tramitación ágil.
El ‘Plan Anticipar’ de ABANCA contempla el apoyo financiero para autónomos, negocios y comercios, un segmento particularmente afectado por esta situación de crisis. Para este colectivo se movilizan cerca de 1.800 millones de euros en crédito preconcedido a corto y largo plazo.
En Agro y Mar, ABANCA ha adaptado su oferta sectorial ofreciéndoles la mayor colaboración en las potenciales dificultades de las próximas semanas a dos sectores que son prioritarios para el banco y claves para la economía de Galicia.
Los más de 850 profesionales de la entidad especializados en los distintos segmentos empresariales y cadenas de valor (empresas, pymes, negocios, mar y agro) han intensificado en los últimos días los contactos con clientes para conocer de primera mano la situación particular de cada empresa o colectivo de cara a poder dar respuestas adaptadas sus necesidades.
Adelanto de pensiones
Este plan de financiación extraordinaria de ABANCA pone el foco en el colectivo de personas mayores debido a su mayor vulnerabilidad ante el escenario actual de alerta sanitaria por el COVID-19. El banco ha decidido adelantar al día 24 de cada mes (o el siguiente día hábil) el pago de todas las pensiones domiciliadas en la entidad, que suman un volumen de 373 millones de euros.
El adelanto del pago de la pensión se realizará de forma automática a los 400.000 clientes que tienen domiciliada su pensión en ABANCA. Dado que, con carácter general, la entidad realiza este abono el último día hábil de cada mes, en este mes de marzo los clientes podrán disponer del dinero una semana (cinco días hábiles) antes de lo habitual.
ABANCA ha adoptado esta medida en un ejercicio de responsabilidad para tratar de apoyar y proteger a un segmento de clientes prioritario y con el que el banco mantiene un compromiso histórico. La entidad da servicio a más de 850.000 clientes mayores de 55 años, el colectivo más numeroso en su base de clientes. En Galicia, es la entidad financiera de referencia para este segmento ‘senior’, al tener domiciliadas una de cada dos pensiones reconocidas en esta comunidad autónoma.
Recomendaciones a clientes
Ante el escenario actual de emergencia sanitaria por coronavirus, ABANCA pide a sus clientes que en su operativa con la entidad extremen las precauciones para minimizar el riesgo de transmisión de la enfermedad y aprovechen las distintas funcionalidades que tienen a su disposición a través de la banca móvil y la banca electrónica, disponibles en www.abanca.com. En el caso de las empresas, el banco pone a su disposición su nuevo servicio de banca móvil para empresas, una aplicación que les permite consultar sus posiciones, realizar transferencias y firmar operaciones pendientes desde sus dispositivos móviles.
ABANCA aconseja utilizar el cajero automático en lugar de acudir a la oficina para la realización de las operaciones más habituales, así como el pago con tarjeta frente al uso de efectivo. En caso de que el cliente tenga que ir a su oficina, el banco ruega que siga las recomendaciones sanitarias, de salud pública y de distanciamiento social.