Que cada residente se sienta como en su propia casa. Este es el objetivo por el que trabajan cada día en la Residencia Arapiles, un centro de mayores ubicado en la carretera de Béjar, concretamente en el término municipal de Miranda de Azán, a tan sólo cinco kilómetros del centro de Salamanca. Sus cuidadas instalaciones, la vocación y trayectoria profesional de sus empleados, así como los valores humanos que rigen su filosofía hacen de esta residencia el entorno ideal para cubrir las necesidades de las personas mayores y sus familiares.

Si hablamos de sus instalaciones, acondicionadas para la seguridad, salubridad, higiene y bienestar de nuestros mayores, cabe destacar que están perfectamente adaptadas para un atención individualizada y llena de cariño. Totalmente reformadas y adecuadas para disfrutar de la tranquilidad, el centro cuenta con cocina, cafetería, capilla, sala de rehabilitación, más de 20.000 metros cuadrados de jardines y, por supuesto, las habitaciones (tanto para personas válidas como asistidas) cómodas y espaciosas con sensores de control para la seguridad como el interruptor de llamadas o el detector de caídas en WC. Otro de sus puntos fuertes es la sala de convivencia donde se ameniza el tiempo libre con distintas actividades lúdicas como bingo, bailes o juegos de mesa.

Dentro de los servicios de terapia ocupacional, realizan todo tipo de actividades, las cuales cumplen una doble labor: además de ser lúdicas, son terapéuticas y se adaptan a las necesidades de cada interno. Así, organizan excursiones y salidas de tipo cultural por la ciudad y la provincia, manualidades, celebración de cumpleaños, campeonatos… También cuentan con otros servicios como cocina casera adaptada a dietas especiales, podología o peluquería. En definitiva, el objetivo es que todos los residentes se sientan cómodos en todo momento sin dejar de lado sus habilidades y aficiones.

Gracias a un completo equipo médico de auxiliares dirigidos por un médico interno de gran prestigio, en residencia Arapiles tienen cabida tanto personas válidas como asistidas. Asimismo, prestan especial atención a los residentes que tienen demencia senil o problemas psicogeriátricos y enfermos de Alzheimer. Una atención que se basa principalmente en el respeto, la autonomía, la profesionalidad y la cercanía, poniendo a disposición del residente servicios y profesionales especializados compuestos por enfermeros, psiquiatras, fisioterapeutas, equipo de DUE, nutricionistas, auxiliares, terapeutas y trabajadores sociales. Todo ello combinado con una filosofía basada en el respeto, el afecto y la integridad personal de cada uno de sus residentes. Y es que en Residencia Arapiles tiene una misión muy importante: curar deleitando.

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