Según la información recogida por el periódico digital El Economista, el número de franquiciadoras andaluzas ha aumentado en 51 millones de euros, consolidándose la franquicia como modelo de negocio en España. Este tipo de comercio también ha crecido en el número de locales de centrales franquiciadoras andaluzas por toda España en 2018, pasando de 5.368 a 5.663 (295 locales más). Un aumento que se ha visto reflejado en el empleo con 1.359, pasando de 14.588 a 15.947.
Según la AEF, Agencia Española de Franquicias, «hay una tendencia creciente en cuanto a la importancia que va adquiriendo cada año la franquicia en Andalucía, la cuarta comunidad española en número de centrales franquiciadoras, con 156». Una tendencia que sitúa a Sevilla y a Málaga como las provincias andaluzas que lideran la comunidad, y animando a los inversores a abrir franquicias de hostelería en Málaga o Sevilla dados los buenos resultados.
Las principales franquicias que lideran el mercado andaluz son relacionadas con la hostelería. Se sitúa a la cabeza Restalia, seguida de cerca de la sevillana La Andaluza y su modelo de taberna típica del sur. Esta empresa de la capital andaluza fue creada por los hermanos Diego y José Manuel Espinosa en 2013 y, actualmente, cuenta con 68 establecimientos de sus dos marcas: La Andaluza y La Andaluza Low Cost. Además, fomenta la franquicia en locales donde es difícil la salida de humos, creando un bar sin extractor de humo en Córdoba y diversas ciudades de la comunidad para solucionar ese problema.
Uno de los éxitos de este modelo de franquiciado es que se ha sabido adaptar a las necesidades del mercado, logrando el triunfo de sus marcas entre el público. Un fenómeno de franquicias andaluzas que comparte espacio con las norteamericanas McDonald’s o Burger King.