La presa de Almendra, enclavada sobre la penillanura zamorano-salmantina y que forma parte del sistema hidroeléctrico conocido como Saltos del Duero, se ha convertido en protagonista de la nueva campaña que la empresa automovilística francesa Peugeot acaba de lanzar de su nuevo 508, “diseñado para conquistar la carretera”.
Para ello, el fabricante francés ha querido contar con algunos de los parajes más espectaculares de la geografía española, entre ellos, la instalación hidroeléctrica de Iberdrola que une dos provincias, Salamanca y Zamora, y que sorprende por sus más de 200 metros, convirtiéndola en una de las presas de mayor altura de Europa Occidental y su capacidad para albergar más de 2.600 hectómetros cúbicos de agua en su embalse.
La secuencia de Almendra, que interpreta a las mil maravillas su papel de escenario principal, se filmó durante dos jornadas completas de trabajo, con un despliegue sorprendente de medios técnicos. El equipo encargado de la grabación utilizó material de última tecnología, donde los drones y las cámaras de alta velocidad se encargaban de grabar las escenas más complicadas.
La renovada berlina de Peugeot, el 508, debutará en sociedad el próximo mes de marzo durante el Salón del Automóvil de Ginebra, no obstante, la marca ha mostrado las primeras imágenes de este nuevo modelo sobre la prensa de Almendra, que comenzará a comercializarse en septiembre, y llega cargado de novedades estéticas, tecnológicas y mecánicas.
La construcción de la presa de Almendra, con casi medio siglo a sus espaldas, supuso romper moldes y abrir páginas en la historia de la ingeniería civil. Hoy sigue sorprendiendo por su grandeza y su belleza que atrae a centenares de visitantes cada año. Su singularidad radica en que la central hidroeléctrica se encuentra a 15 kilómetros de distancia en Villarino de los Aires, donde el agua llega a través de un túnel de siete metros y medio de diámetro excavado en la roca.
Iberdrola: más de un siglo apostando por las energías sostenibles
La apuesta de Iberdrola por las energías limpias comenzó con la construcción de los Saltos del Duero y, después de más de un siglo, ese compromiso se ha hecho aún mayor, como lo demuestra el hecho de que la empresa sea en la actualidad líder mundial en energía eólica.
El caudaloso río Duero, a pesar de ser vehículo de transporte durante largas épocas, ocultaba, en su tramo inferior, un tesoro inimaginable en forma de energía. Fue el ingeniero José Orbegozo quien, después de estudiar el río y vislumbrar la totalidad del cañón, se dio cuenta de las enormes posibilidades del tramo internacional y de la magnitud del proyecto.
El proyecto consistía en construir saltos poderosos que aprovecharan la fantástica caída del agua y crear grandes embalses en los ríos Esla y Tormes. Estos embalses regularían el caudal y garantizarían la producción de las potentes centrales que se instalasen aguas abajo, bien en el tramo nacional o internacional del Duero, que, en la misma frontera entre España y Portugal y a lo largo de 160 kilómetros de curso, ofrecía un desnivel de 400 metros.
Este proyecto representa uno de los hitos más importantes de la historia ya más que centenaria de Iberdrola, una historia que es la suma de los esfuerzos de varias generaciones de hombres de empresa que han sabido aprovechar, en cada momento, las oportunidades del mercado eléctrico, con el objetivo último de dar respuesta a las demandas del desarrollo industrial y del bienestar de la sociedad española.
Aquí podéis ver el vídeo https://youtu.be/hW9QVx_2uOU