Según HomeServe, las bajas temperaturas y el confinamiento han incrementado el gasto de la calefacción un 20%
El uso de la calefacción representa el mayor gasto en el consumo de gas en los hogares en los meses de invierno, con un 57% del consumo total, seguido del agua caliente 38% y de la cocina el 5%. En este comienzo de año, la factura de enero se ha visto incrementada hasta en un 20%. La ola de frío y las restricciones de movilidad han obligado a pasar muchas horas en casa con la calefacción al máximo. Según ha publicado el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) el gasto familiar en la factura de gas ha llegado en el primer mes del año a alcanzar una media de 255 €.
El mayor uso de la calefacción también ha generado un aumento del 8% en los servicios de reparación de averías de calderas con respecto al año anterior*. Averías que suelen producirse en los momentos más inadecuados y que pueden generar un problema de seguridad en la vivienda. En un contexto de necesidad de ahorro como el actual, lo mejor es evitar cualquier gasto imprevisto y seguir algunos pequeños consejos que ayudarán a mantener el calor, garantizar el correcto funcionamiento de la caldera y reducir la factura, así como conseguir que el hogar sea más sostenible y eficiente.
En España se estima que existen más de 2 millones de calderas, pero solo una de cada cuatro4 pasa por una correcta revisión ante la llegada del invierno. La revisión periódica de la caldera garantiza un correcto funcionamiento y una garantía de seguridad, siempre y cuando sea realizada por profesionales expertos y autorizados. HomeServe, empresa especializada en soluciones para el mantenimiento y cuidado del hogar, recomienda ser previsores y realizar una vez al año una comprobación y estudio de la instalación de gas y en especial de la caldera, calentadores y termos. Según los datos disponibles, el coste medio de una avería de la caldera supera los 250€. En cambio, un buen mantenimiento es sinónimo de 17 años de vida media de una caldera.
Incidencias más habituales
No es suficiente con las inspecciones obligatorias. Se necesita llevar a cabo un mantenimiento periódico anual. El mantenimiento básico de cualquier sistema de calefacción requiere una limpieza anual de los quemadores y la realización de pruebas de monóxido. El monóxido de carbono es un gas incoloro e inodoro, por lo que no es fácilmente reconocible y esto aumenta su peligrosidad ya que puede provocar disfunciones cardíacas, dolores de cabeza, mareos y fatigas, entre otros síntomas.
Otros problemas comunes en las calderas son la obstrucción de salidas de humos, la bajada de presión, el bloqueo en la bomba de recirculación, la rotura de la válvula de seguridad o problemas con la sonda de la temperatura.
Un correcto mantenimiento de las instalaciones evitará que las pequeñas incidencias se conviertan en complicaciones de mayor gravedad y coste. Por ello, es recomendable acudir a un profesional especializado para llevar a cabo la revisión técnica de la caldera o contar con servicios como Home Mantenimiento Gas que por 9,50€ al mes incluye la revisión anual de las instalaciones y cubre los imprevistos, con un servicio de emergencia las 24 horas al día y un año de garantía en las reparaciones.
5 Consejos prácticos para reducir el gasto en calefacción
- Asegurar que la presión está entre 1,2 y 1,5 bares como máximo.
- Establecer una temperatura de confort adecuada, 19ºC cuando no hay nadie en casa o por la noche, y no sobrepasar los 22ºC cuando la casa esté ocupada.
- Comprobar que los radiadores calientan bien. Par ello, es recomendable no cubrirlos y purgarlos una vez al año para eliminar el aire acumulado en el circuito de calefacción. Purgar los radiadores puede suponer un ahorro de energía del 10% anual, lo que supone alrededor de unos 80 € al año.
- Realizar un buen aislamiento. Comprobar que no existen entradas de frío y, si las hay, instalar burletes y cintas de material aislante.
- Reducir la temperatura de la caldera: si la caldera no tiene un diferenciador de agua que permita establecer una temperatura para la calefacción y otra para agua corriente, la temperatura debe estar entre 50 – 55 grados. Si hay diferenciador, entonces el agua corriente deberá estar a 45 grados, y la de calefacción a 55.
*Comparativa realizada entre el volumen de servicios efectuados entre octubre 2019 – enero 2020 y octubre 2021 – enero 2021