La Oficina Europea de Patentes (OEP) y el Banco Europeo de Inversiones (BEI) han publicado un estudio conjunto,Deep Tech Innovation in Smart Connected Technologies, en el que han realizado un análisis pymes dentro de la Unión Europea que desarrollan nuevas tecnologías digitales avanzadas en lo que se ha venido a llamar la Cuarta Revolución Industrial (4IR).
Pese a que Europa se encuentra por detrás de países como Estados Unidos, Japón, China o Corea del Sur, principales centros de innovación mundiales en especialización 4IR, la UE tiene 2.634 empresas dedicadas a este ámbito.
En el informe, España parece carecer de especialización en tecnologías 4IR (computación en la nube, the Internet of Things, las redes 5G y la inteligencia artificial, entre otras), pero, sin embargo, son sus pymes las que mueven las patentes hasta un 19%.
“De hecho, es el tercer porcentaje más alto dentro de la UE y casi el doble de la media. Eso significa que la falta de especialización no es por la falta de pymes activas sino de grandes empresas españolas activas en tecnologías 4IR” explican desde La Oficina Europea de Patentes (OEP).
Para situar a nuestro país, habría que llegar hasta el séptimo lugar, con 154 pequeñas empresas que presentan patentes, por delante de países como Dinamarca, Bélgica, Austria o Irlanda.
A la cabeza, se encuentran países como Alemania (570), Francia (400) e Italia (273). Lo que está claro es que las patentes son muy importantes para asegurar la financiación. Tanto que el 80% informa en el estudio que la estrategia de Propiedad Intelectual es relevante para sus inversores.
¿Cuáles son las causas de que la UE siga atrás? En principio, se podría explicar con la falta de financiación y, por tanto, de talento cualificado trabajando en proyectos en la UE.
El documento muestra que las pymes activas en tecnologías conectadas inteligentes tienen una intensidad de inversión superior a la media, deben hacer frente a mayores costes de desarrollo y también necesitan tiempo para llevar sus innovaciones al mercado.
El estudio, que incluye cuatro casos que complementan la investigación y proporcionan una visión más amplia de los desafíos a los que se enfrentan las empresas de tecnología avanzada cuando se trata de llevar sus invenciones al mercado, propone dos herramientas que podrían fomentar la innovación en Europa:
• Subvenciones específicas y políticas de desarrollo para startups y ayudar a las empresas 4IR, combinadas con rondas de financiación disponibles para el desarrollo de las pymes.
• La colaboración europea en materia de propiedad intelectual, como la introducción de un sistema unitario de patentes para la UE, es un avance positivo. La promoción de las habilidades digitales y las oportunidades de educación superior, figuran entre las propuestas del estudio a largo plazo.