Es muy importante garantizar la correcta revisión del vehículo y evitar así cualquier contratiempo antes de las vacaciones de verano, según Northgate
Las vacaciones de verano son uno de los momentos más esperados para disfrutar del merecido descanso, desconectar de la rutina y del trabajo. A la hora de plantear el ansiado momento vacacional, el año pasado el 78% de los españoles prefirieron el coche como medio de transporte para viajar en verano, según el Barómetro del CIS de julio de 2021, ya que aporta autonomía para moverse y desplazarse y no está sujeto a horarios de salida o llegada al destino.
Por este motivo es muy importante realizar una revisión previa del estado del automóvil. De este modo, se evitan contratiempos que trastoquen el viaje o estropeen los planes previstos. Desde Northgate, cuyos talleres están disponibles para cualquier vehículo sea o no de renting, han recopilado qué aspectos claves son los que hay que vigilar y tener en cuenta antes de iniciar las vacaciones de verano, así como consejos para los conductores acerca de cuándo deberían llevar el coche al taller.
¿Qué hay que vigilar antes de irse de vacaciones?
Muchas personas acuden únicamente al taller cuando ya han tenido una avería o cuando necesitan realizar una reparación. Sin embargo, la prevención y la anticipación son clave para evitar males mayores y llevar el mantenimiento del vehículo con la mayor optimización posible. En este sentido, hay que estar atentos a algunas señales del vehículo que indicarán cuándo hay que llevarlo al taller, sobre todo para utilizarlo en desplazamientos durante las vacaciones estivales.
Es muy importante prestar atención a los ruidos, ya que pueden ser la primera señal de alerta de algún problema. Por ejemplo, la necesidad de añadir líquido refrigerante, la erosión de las pastillas de freno o que el disco ha empezado a desgastarse. En cuanto a los olores, si de repente el coche desprende un fuerte olor a carburante es posible que haya una fuga en el sistema o que el catalizador esté dando problemas. Si por ejemplo el humo que expulsa el vehículo cambia de color, especialmente si es azulado, puede indicar que alguna pieza del motor esté desgastada y lo más recomendable es acudir rápidamente al taller.
Otra recomendación es prestar atención a la intensidad de las luces y no esperar a que se fundan, ya que de este modo se evitará circular sin ellas a pleno funcionamiento, con el consiguiente problema de visibilidad que puede acarrear.
¿Cuándo llevar el coche al taller?
De cara a las vacaciones de verano, y de cualquier desplazamiento largo, siempre es recomendable llevar el coche al taller para realizar una revisión completa del estado del vehículo. En ese caso, cualquier anomalía será reparada en el momento y se garantizará el buen estado del coche antes de emprender el periodo de descanso.
Aún así, hay ciertas revisiones que todos los vehículos deben realizar y que es importante tener en mente para anticiparse a posibles averías. Por ejemplo, se recomienda cambiar el aceite, el líquido refrigerante y el líquido de frenos cada 20.000 o 30.000 km; sustituir los neumáticos por otros nuevos, cuando ya tengan una vida entre 40.000 y 50.000 km; reemplazar la correa de distribución entre 100.000 y 120.000 km.
Además de estas recomendaciones generales, desde Northgate aconsejan a cada usuario que consulte el manual de su vehículo para saber de manera concreta cuándo hay que sustituir cada pieza o líquido y cuándo son las revisiones óptimas de su coche. Por supuesto, la comprobación constante del correcto funcionamiento de todos los componentes del vehículo es la mejor de las recomendaciones para que el automóvil siempre funcione de la mejor manera posible.
Fuente Comunicae