Factores como la adaptación, el material, la superficie y los hábitos del paciente afectan al buen resultado del uso de lentes de contacto, según un estudio. Además de corregir el desequilibrio visual, los tratamientos farmacológicos o sistemas ópticos (lentes oftálmicas y lentes de contacto), por separado o combinados, están demostrando ser efectivos en el control de la evolución de la miopía en niños
Como ya es sabido, los casos de miopía en la población aumentan cada año y, según los consejos de los expertos es necesaria la detección temprana con revisiones periódicas y seguimiento de tratamientos indicados para conservar una correcta salud visual durante más tiempo.
Si se habla sobre la prevalencia de la miopía infantil en España, también va en aumento. Debido a la pandemia esta situación ha perjudicado más a la vista a este colectivo por el aumento de exposición a pantallas y por la limitación de pasar tiempo al aire libre, situación que poco a poco se está recuperando.
Los controles visuales periódicos son la mejor herramienta para detectar el problema. Se sabe que en la mayoría de los casos la miopía aparece entre los 6 y 10 años y se desarrolla durante la época de crecimiento, estabilizándose entre los 21 y 25 años de edad. Lo normal es hacer exámenes visuales anualmente si el especialista de la visión no indica que sean de manera más frecuente.
Según afirma Fabio Cottet, director óptico de Cottet Óptica y Audiología aunque tiene un componente hereditario la mayoría de las miopías se provocan por cambios ambientales. “El estar en entornos cerrados con poca exposición solar y dedicar la mayor parte del tiempo a tareas que requieren estar mirando de cerca, actualmente se consideran los factores decisivos para la aparición de la miopía en niños y su progresión”.
Alrededor del 30% de los niños menores de 8 años usa el móvil todos los días, lo que hace que su graduación en miopía se haya incrementado en 1,75 dioptrías en los cinco últimos años, ocho décimas más que las personas de entre 17 y 27 años, según datos del Colegio Oficial de Ópticos y Optometristas de Cataluña (COOOC).
Asimismo advierte la Organización Mundial de la Salud (OMS) que la miopía está aumentando a nivel mundial a un ritmo alarmante. Un 50% de la población mundial será miope para el 2050, de las cuales una cuarta parte serán miopes de más de cinco dioptrías de miopía lo que conllevará el riesgo de padecer enfermedades oculares graves e incapacitantes como el glaucoma, desprendimiento de retina o retinopatía miópica y supone una gran complicación para la salud pública. Por todo esto la OMS ha declarado la miopía pandemia del siglo XXI.
Sobre cómo influye en la salud ocular de los niños el uso de lentes de contacto el estudio “Ocular Health of Children wearing daily disposable contact lenses over a 6-year period (publicación ElSevier)” arroja datos interesantes. La investigación se realizó a 144 niños de 6 años en un ensayo clínico para investigar el rendimiento de una lente de contacto de hidrogel blando de enfoque dual diseñada para controlar la progresión de la miopía. Los resultados sugieren que los niños de esta edad pueden usar con éxito lentes de contacto de hidrogel desechables a diario con un impacto mínimo en la fisiología ocular. El artículo también analiza los muchos factores que afectan al buen resultado del uso de lentes de contacto, incluido su adaptación, el material, la superficie y los hábitos del paciente.
El experto de Cottet indica que “cuando la miopía ya está presente, existen métodos para ralentizar su evolución, pero todavía no para reducir o parar del todo su evolución. Se disponen de tratamientos farmacológicos o sistemas ópticos (lentes oftálmicas y lentes de contacto) que por separado o combinados están demostrando ser efectivos en el control de la evolución de la miopía en niños”.
Además, el experto comenta que “fisiológicamente no hay ningún problema para que los niños usen lentes de contacto. El especialista de la visión analiza cada caso y recomendará la mejor opción. Todas las soluciones ópticas son personalizadas y el profesional es el que tiene que recomendar la mejor opción para el niño, e igualmente para los adultos”.
Según datos de la Asociación Visión y Vida, la sobreexposición a las pantallas y pasar poco tiempo al aire libre en la infancia, inciden en el desarrollo de la miopía. Apunta también que la mitad de las personas entre 18 y 34 años en España ya son miopes y que afecta más a las mujeres (57,7%), que a los hombres (48,7%). Cuando esta miopía supera las cinco dioptrías, puede derivar en patologías visuales, tales como DMAE o glaucoma”.
Práctica de actividades y deportes con gafas o lentillas
La alimentación, el descanso/dormir bien y el ejercicio físico son muy importantes para el desarrollo mental y físico de los pequeños de la casa. Para la práctica deportiva es imprescindible tener una buena visión, y llevar una protección adecuada en ojos. Por eso la recomendación del experto de Cottet es que “los niños realicen sus actividades deportivas extraescolares o de fin de semana con una gafa deportiva específica, bien sea graduada o combinada con lentillas y recalca que es importante que no lleve su gafa habitual, pues posiblemente no está diseñada para tal efecto y no homologada como elemento de protección visual”. Asimismo asegura que “las lentes de contacto en niños son una buena opción por la libertad de movimientos que dan y sobre todo en la actividad deportiva”.
Por lo que sabe hasta ahora la mejor manera de prevenir la aparición de la miopía es incrementar las actividades al aire libre con luz solar durante el día. Por norma se recomienda que los niños estén como mínimo una hora y media al día al aire libre, jugando, haciendo deporte, etc. evitando seguir mirando de manera constante de cerca. De nada sirve que sigan con una consola en el parque.
Cuidado de lentillas
Para el uso de lentillas, desde la Sociedad Española de Optometría (SEO) aconsejan centrarse en el lavado de manos «antes de poner o retirar las lentes de contacto o tocar el portalentillas o el bote de lentillas». Además, recomiendan frotar y enjuagar aquellas lentillas que no sean de uso diario y cambiar diariamente el producto de conservación del estuche de las lentes quincenales, mensuales o trimestrales.
Referencias: Cottet Óptica y Audiología, Colegio Oficial de Ópticos y Optometristas de Cataluña (COOOC), Visión y Vida, SEO y https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S1367048420302046, OMS.