La firma global de soluciones de talento Robert Walters destaca las políticas económicas y contextos sociales de la Unión Europea que marcarán el mercado de trabajo en 2025, recogidas en su último
Tras un número récord de elecciones nacionales en 2024, muchos países europeos deberán adaptarse a su nuevo gobierno. Las nuevas políticas gubernamentales buscarán abordar la creación de empleo, ya que muchos de estos países se enfrentan a una población envejecida, escasez de habilidades, inflación salarial y elevados costes en empleo.
Cabe destacar que Europa no es el único continente que ha experimentado una desaceleración en la contratación desde el récord de vacantes laborales de 2022. La tasa de ofertas de empleo que no llegan a cubrirse se sitúa actualmente un 2,9% por encima de la media.
¿Qué está ocurriendo con el empleo en Europa?
“El envejecimiento de la población es uno de los aspectos en los que más se están centrando las políticas de talento de empresas en Europa. Y es que en los próximos años habrá más profesionales en edad de jubilarse que en edad de incorporarse al mercado laboral”, analiza Alexandre Coffin, Regional Commercial Director de Robert Walters en España, Italia y Portugal.
La fuerza laboral europea se enfrenta al declive demográfico. Aunque esto es una tendencia generalizada, Italia es uno de los países en los que las empresas corren el riesgo de enfrentarse antes a la escasez aguda de habilidades, lo que dificulta la contratación y fidelización de perfiles cualificados. Según IDOS, Italia necesitará al menos 280.000 profesionales extranjeros al año hasta 2050, incluyendo a los italianos expatriados que se sumaron a la fuga de cerebros derivada de las diferentes crisis financieras.
Las empresas suizas también están teniendo dificultades para encontrar las habilidades requeridas en el actual mercado laboral. En promedio, cada trimestre de 2024 se quedaron sin cubrir unos 114.000 puestos de trabajo en Suiza debido a esta escasez de competencias.
En cuanto a vacantes de empleo sin cubrir, Bélgica se encuentra entre uno de los países en los que esta problemática preocupa más a los empresarios. Algunos de los puestos en los que existe escasez de talento están relacionados con la ingeniería civil, la contabilidad, la enfermería o el desarrollo de software.
“En la mayoría de los casos, las organizaciones no cuentan con los recursos económicos necesarios para poder competir por el talento que escasea. De ahí que sea tan importante que las compañías conozcan cuál es el paquete retributivo que ofrecen otras empresas para así mantenerse competitivas, así como capacitar a sus equipos en las competencias que serán requeridas para la viabilidad del negocio”, apunta Coffin.
Del otro lado se encuentra Irlanda, que ha experimentado el mayor crecimiento en empleo entre 2019 y 2023, con un incremento del 13,5%, lejos de la media de la Unión Europea del 2,7%. La actual fuerza laboral de Irlanda es la más alta registrada a medida que el mercado laboral se acerca al pleno empleo, algo estrechamente relacionado con la generación de empleo de las grandes multinacionales que se instalan en el país. En 2024, los ingresos por impuestos corporativos de las grandes multinacionales alcanzaron los 23.800 millones de euros. Esta cifra era de solo 4.600 millones en 2014, ya que la dependencia de organizaciones extranjeras como Apple, Meta o Intel ha aumentado durante la última década.
También cabe destacar el papel de Portugal en la atracción de multinacionales y pymes tecnológicas, gracias a su talento altamente cualificado con un coste operativo muy competitivo, el gran volumen de población que está estudiando y su posición como puerta de entrada a los mercados latinoamericanos y europeos.
“Compañías como Google, Microsoft, AWS, Oracle, Vestas, Revolut o Finastra están generando empleo cualificado de calidad en Lisboa y Oporto. Esto se suma a la demanda de talento impulsada por más de 2.500 start-ups y scale-ups que se asientan en el país”, añade Alexandre Coffin, Regional Commercial Director de Robert Walters en España, Italia y Portugal.
La inversión extranjera directa (FDI) también es fundamental para el crecimiento económico y la generación de empleo de mayor calidad. En el caso de España, más de un tercio de estas inversiones fueron destinadas a las energías renovables, asegurando 77 nuevos proyectos en 2024. El turismo también destaca su papel clave en el país, batiendo el récord de 94 millones de visitantes, un 10% más que en 2023, aportando un gasto turístico de 126.000 millones de euros (+16%).