En su más reciente obra, el autor invita a los lectores a sumergirse en un mar de reflexiones y emociones, desafiando las convenciones con su poesía evocadora y audaz
En el vasto océano de la literatura contemporánea, ‘El privilegio de aprender a nadar’ de Roberto Gallego emerge como una isla de introspección y belleza poética. Este poemario, más que un conjunto de versos, es un viaje a través del alma humana, una travesía por los mares del ser y del sentir.
Gallego, un escritor y poeta madrileño, conocido por su versatilidad y profundidad, explora en esta obra temas universales como la libertad, la soledad, el amor, la represión o la salud mental, entre otros. A través de cuarenta poemas, y uno especial dedicado a su hija, invita a los lectores a considerar su propia existencia en un mundo cada vez más digital y desconectado de la naturaleza humana.
«Sentía la necesidad de narrar en verso y de manera simple lo complejo que es flotar, nadar y no hundirse en esta sociedad, a veces dormida y siempre frenética, que no se cansa de imponernos cosas: estar siempre felices, aunque sea mentira; no fracasar en nada, aunque sea imposible; aparentar y aparentar, albergando un pánico horrible a la pausa, a quedarnos a solas con nosotros mismos», comenta Gallego en una reciente entrevista.
Estas palabras resuenan a lo largo de su obra, donde una de ellas presenta un paisaje lírico y actúa como un espejo del alma, reflejando las luces y sombras de la experiencia del vivir.
El poemario se abre con un prólogo emotivo y perspicaz de la cantante mexicana Renee Mooi, quien describe el libro como un «testimonio que desafía al mundo actual con determinación y autenticidad».
Gallego establece una crítica sobre la pérdida de la realidad en un paradigma cada vez más digitalizado, en el que a veces estar en sintonía con las emociones, abrazar los miedos y besar las penas resulta francamente imposible.
«En la era del individualismo actual necesitamos puentes, más diálogo y pensamiento colectivo. Y el arte ha sido y siempre será el canal perfecto para unirnos, para darle sentido a las debilidades de todos y atrapar la esencia y la alegría que nos rescata», dice, con una consciencia aguda sobre la relevancia de su obra en el contexto actual.
Su poesía, caracterizada por su honestidad cruda y su belleza lírica, aborda también la complejidad de las relaciones humanas y la búsqueda del yo. El autor no explorarlos, pese a que estos a menudo son evitados o ignorados en la sociedad contemporánea.
«Lo que me sucede influye en mi literatura, como influye el día a día del mundo en el que vivo. Nada me es ajeno, y me esfuerzo para ello», afirma Gallego.
El privilegio de aprender a nadar no es solo un libro de poesía; es una invitación a reflexionar, a sentir, y a conectar con lo más profundo de uno mismo y de la realidad que le rodea.
Con esta obra, Roberto Gallego se consolida como una voz indispensable en la literatura contemporánea. Un poeta que no solo escribe versos, sino que crea mundos, y que recuerda que, a pesar de los desafíos en un tiempo donde la rapidez y la superficialidad a menudo dominan el panorama, la poesía sigue siendo una brújula que guía a las personas hacia su esencia más auténtica.
Este poemario está disponible en la web de la editorial y en librerías.
Fuente Comunicae