España lidera la implementación del primer proyecto
piloto de reconocimiento facial a nivel europeo, gracias a la colaboración de Aena y Air
Europa. La tecnología biométrica permitirá agilizar los procesos de control,
identificación y acceso a las zonas de embarque.
La tecnología de identificación biométrica supone ventajas notables como el tránsito
libre, más rápido, seguro y ágil por el aeropuerto. Un avance encaminado a facilitar el
acceso de los pasajeros al avión, proceso que hasta ahora suponía una clara desventaja
con respecto a otros transportes como el tren o el autobús.
Los pasajeros que opten de manera voluntaria por el embarque biométrico podrán
acceder al control de seguridad y a las puertas de embarque sin necesidad de mostrar
la tarjeta de embarque ni la documentación identificativa.
El aeropuerto elegido para llevar a cabo la prueba piloto ha sido el de Menorca, dónde
los pasajeros de Air Europa que quieran participar en el proyecto podrán hacerlo con
una simple operación que será válida durante el tiempo que se prolongue el proyecto
piloto, inicialmente previsto para un año.
Elsistema de reconocimiento facial incorpora un lector de documentación y una cámara
con la que se fotografiará al pasajero, lo que permitirá comparar sus facciones con la
imagen del documento que se muestra al lector. Si coinciden, el pasajero podrá acceder
tanto al filtro de seguridad como a la puerta de embarque sin necesidad de volver a
mostrar su documentación, aunque siempre deberá llevarla consigo.
Por supuesto, aquellos pasajeros que no deseen acceder mediante el reconocimiento
facial podrán hacerlo como hasta ahora, presentando su tarjeta de embarque y la
documentación identificativa.
La implantación del embarque biométrico facial ha sido posible gracias a la participación
conjunta de Aena y las dos empresas del grupo Globalia, Air Europa y GroundForce; así
como de Everis Aeroespacial y Defensa y dormakaba.