Las empresas que ofrecen más satisfacción a su personal retienen mejor el talento y aumentan la productividad. El bienestar físico y psicosocial son algunas de las claves que mejoran el ambiente laboral
Trabajar es una parte indispensable de la vida. No solo provee de medios económicos, sino que es (o debería ser) un espacio de socialización, de aprendizaje y de desarrollo personal. Así que, además de hacerlo a cambio de un salario, también es necesario poder sentir que el ámbito laboral es un sitio más donde vivir la vida.
Las propuestas de cultura corporativa que buscan mejorar la comunicación entre los empleados, así como mantener un canal con los puestos directivos, permiten entornos mucho más empáticos con las necesidades de los trabajadores.
Las empresas sensibles a estas cuestiones, suelen fomentar el acceso a servicios y beneficios que permiten a los trabajadores vivir y desarrollar su actividad de una manera más saludable. Ahí, es donde radica una de las claves del éxito empresarial; la preocupación por valorar, atraer y retener el talento.
Del mismo modo, empresas como Google, ADIF o Sodexo ofrecen ventajas adicionales para cuidar de sus empleados, que van desde contar con un chef en las instalaciones, a ofrecer planes de ocio o atención psicológica.
La compañía tecnológica Kairós DS, también es una de estas empresas que aparece una y otra vez en los ránkings de mejores sitios para trabajar. «Es una combinación entre identificar proyectos que realmente aporten a los equipos y a los clientes, y poder ofrecer un espacio seguro en el que desarrollarse», reflexiona Irene M. Morgado, Head of Talent & Brand de Kairós DS España. “Contamos con un área de profesionales especializada en escuchar a los y las trabajadores, y tenerlos en cuenta”.
“Entre los beneficios que ofrecemos en Kairós DS, están el acceso a servicios de salud mental y el reparto de acciones de la empresa; ya sean compañeros antiguos o recién llegados. Es un compromiso claro con aquellas personas que trabajan con nosotros, dándoles voz en los asuntos de la empresa e implicándoles en su desarrollo”, afirma Irene.
Liderazgo y diversidad
La diversidad es también clave para ser un “gran sitio para trabajar”. Los equipos diversos son más creativos que los homogéneos. Además de promover el trato justo y ofrecer una experiencia laboral de calidad, tanto a los empleados y empleadas más juniors como a los más seniors.
Significa que cada persona, independientemente de su rol en la organización, su género, orientación sexual, etnia o religión, etc., pueda ser ella misma en su lugar de trabajo. Para ello, es necesario promover políticas de diversidad e inclusión en la empresa.
Según la Fundación Adecco, la diversidad aplicada al talento en las empresas no debe responder a cuotas ni a prejuicios, sino a competencias, habilidades, experiencias, conocimientos, valores y actitudes diferentes aportadas por personas que se complementan para crear un equipo competitivo que responda a las necesidades del mercado y de la sociedad. Con esta visión se da por hecho que el talento no entiende de etiquetas sino todo lo contrario.
Todo ello da buenos resultados si, además, es acompañado por un buen liderazgo, basado en la credibilidad, el respeto, la imparcialidad y el compañerismo. En un mercado laboral sumamente competitivo, como es el tecnológico, cuidar a las personas con buenas prácticas, no tiene precio.
“Si pensamos en el liderazgo, pocas variables hay tan estrechamente asociadas a la cultura de nuestra empresa como el respeto a todas las personas”, asevera Irene. “Intentamos proyectarlo a todos los equipos, escuchando y respondiendo a las necesidades que surgen, y tratando de encontrar herramientas que nos ayuden a estar más cerca de ellos”.
Ser un gran sitio para trabajar es rentable y eficiente
Gestionar un equipo de trabajadores con altos niveles de satisfacción se traduce en un impacto positivo para la organización. Según el estudio realizado por el ente certificador Great Place to Work sobre compañías que cotizan en bolsa y que disponen de la certificación Great Place to Work, estas empresas reciben un impacto directo en su índice bursátil, obteniendo un retorno de tres veces más que los competidores gracias a esta certificación.
Igualmente, las empresas que han apostado de manera ambiciosa por planes de conciliación laboral o que se adelantaron a implantar jornadas de teletrabajo antes de la pandemia, como Orange, han descubierto que la productividad de los trabajadores no disminuye, sino que aumenta un 30%, reduciendo además muchos de los gastos asociados al llamado “presentismo”; la tendencia a estar en el centro de trabajo más horas de lo establecido, a veces sin motivo.
El lograr que una empresa sea un “gran sitio para trabajar”, no solo redunda en el bienestar de las personas que trabajan en ella, sino que ayuda a identificar y a eliminar ineficiencias, optimiza los flujos de trabajo, incrementa la productividad y, finalmente, hace a la empresa más rentable y más susceptible de atraer inversiones.