El final de verano vuelve a poner en marcha toda la maquinaria en las empresas. Para quienes han podido disfrutar de vacaciones y de un descanso, septiembre se convierte en una suerte de principio de organización como lo es enero.
Este será el mes en el que habrá que planificar el final del 2021 para tratar de exprimir al máximo las oportunidades de salir con mejores resultados que los que se consiguieron en el año anterior y, para ello, habrá que primero echar un vistazo a las webs corporativas.
Para quienes ya tienen una en marcha, será importante echar un vistazo a las mejoras que puedan acompañar las últimas estrategias establecidas. Una optimización de la navegación, mejora de imágenes o multimedia, mejores menús y más predictivos y, sobre todo, el que en cada dispositivo se vea de forma correcta, van a ser solo algunas de las claves, pero, ¿qué pasa con quienes van a dar el salto y a apostar por crear su web?
“Lo primero que hay que pensar en que una web está pensada para conseguir la conversión y la venta o contratación de servicios, por lo que debe dejarse en manos de profesionales para que de verdad el desarrollo y diseño sean lo más efectivos posibles” explican desde Rodal Design.
¿Qué no debe faltar en una web en pleno 2021?
Para empezar, deben ser responsive, es decir, que cada pantalla que sea capaz de adaptarse al tamaño de las pantallas desde las que se visualizará de forma correcta, sin demasiada demora en la carga de contenido ni ocultación de partes del propio diseño.
El que desde el mismo diseño se plantee una estrategia de palabras clave y seo que ayuden a posicionar la web tan pronto esté en línea es también uno de los puntos a tener en cuenta cuando se hable con los diseñadores web. Está claro que habrá que buscar las fortalezas para poder destacar.
Este año y después de un 2020 con más de la mitad de webs corporativas sufriendo ataques, es clave que en el diseño se plantee una estrategia de seguridad que garantice a los usuarios la máxima tranquilidad al navegar por ella y efectuar los pagos. Es por ello que invertir en seguridad web es uno de los grandes aciertos.