Sin rodeos: el Golf R es, sencillamente, el Golf de serie más potente jamás desarrollado por Volkswagen. Representa como ningún otro la conjunción perfecta entre deportividad y exclusividad. El modelo tope de gama de la octava generación del Golf esconde bajo el capó 320 CV de puro genio y prestaciones incomparables. Altamente dinámico, referencia tecnológica de su segmento, el nuevo Golf R es el primer Volkswagen que incorpora tracción total 4MOTION con reparto vectorial del par R-Performance Torque Vectoring, que abre la puerta a una nueva dimensión en materia de dinámica de conducción. Por si fuera poco, el cuidado diseño de todos sus elementos y sus equipamientos exclusivos le confieren un carácter genuino que, combinado con su elevado rendimiento, prometen una experiencia de conducción a la altura de los fans más incondicionales del Golf.
El nuevo Golf R reina por encima de todos los demás como el modelo más potente de la octava generación del compacto por excelencia. Su motor 2.0 TSI 235 kW (320 CV) con transmisión DSG de 7 velocidades es simplemente superior a cualquier otro propulsor ofrecido hasta la fecha en la gama Golf. Con ADN deportivo, la quinta edición del Golf R es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en unos impresionantes 4,7 segundos y alcanzar una velocidad punta de 250 km/h. Esta puede ampliarse hasta los 270 km/h con el paquete opcional R-Performance, que también incluye el perfil de conducción «Special» dedicado a Nürburgring y cuyos parámetros están adaptados a las características del legendario circuito. Pero el secreto de la potencia del Golf R no es solamente su propulsor, sino la combinación de este con un elevadísimo par motor de 420 Nm, un chasis de última tecnología y la nueva tracción total de Volkswagen, que juntos establecen una nueva referencia en términos de dinámica al volante. La tecnología que incorpora el deportivo compacto le permite nada menos que mejorar los registros de pilotos profesionales en circuito.
El sistema de tracción total 4MOTION con el sistema de reparto vectorial del par conocido como R-Performance Torque Vectoring actúa como centro de control, distribuyendo la potencia del motor de gasolina turboalimentado del Golf R no solo entre los ejes delantero y trasero, sino también, de forma variable, entre las dos ruedas traseras. Esto le confiere al Golf R una agilidad significativamente mejorada, especialmente en las curvas, que hacen que la conducción, además de dinámica y divertida, sea especialmente cómoda. Por primera vez en un coche, gracias al Gestor Dinámico de Marcha, la tracción total también está interconectada con otros sistemas del chasis, como el bloqueo de diferencial (XDS) y el control de chasis adaptativo DCC. La integración de estos sistemas, la reducción de peso de varios componentes y la barra estabilizadora trasera deportiva, que aumenta la estabilidad y resistencia a la torsión en el paso por curva, resulta en unas características de tracción óptimas y en una conducción de alta precisión.
Pero el Golf R es un coche con ADN deportivo de arriba abajo. Bajo el capó y fuera de él. La quinta generación del Golf tope de gama cuenta con una cuidada estética deportiva exterior e interior. El frontal monta un paragolpes exclusivo «R» con aperturas de refrigeración sobredimensionadas y apliques de color negro brillante. La carrocería incorpora diversos elementos de color negro adicionales, como el difusor trasero deportivo, las inserciones decorativas del alerón trasero o las llantas de aleación ligera «Jerez» de 18 pulgadas. Además, el exterior del vehículo cuenta también con taloneras laterales sobredimensionadas, molduras decorativas de color azul en la parrilla frontal y faros, además de cuatro salidas de escape situadas en pareja a izquierda y derecha de la carrocería, que acentúan el carácter deportivo del Golf R. Las carcasas de los retrovisores, en Cromo Mate, proyectan el logo «R» en el suelo.
El interior ofrece un acabado exclusivo alineado con el diseño deportivo exterior. Destacan especialmente los asientos deportivos premium de tipo bucket con tapicería «ArtVelours», costuras decorativas azules y el logo «R» bordado. El volante deportivo multifunción calefactado es de cuero perforado, y dispone de levas de cambio sobredimensionadas para la transmisión automática DSG, controles táctiles con el botón «R» del Selector de Modo de Conducción directo y el logo «R» en el centro. Opcionalmente, con el paquete R-Performance, el Selector de Modo de Conducción ofrece también modos de conducción específicos, como el modo «Drift» (que permite el deslizamiento del eje trasero) o el ya mencionado modo «Special». El Digital Cockpit, con la configuración exclusiva «R-View», está optimizado para competición y completa la oferta de equipamientos en el interior.
El nuevo Golf R con motor 2.0 TSI de 235 kW (320 CV) y transmisión automática DSG de 7 velocidades ya está disponible con un precio de lanzamiento de 51.300 euros.