La capital gallega acoge hoy la reunión de las quince Ciudades Patrimonio de la Humanidad de España, en un encuentro en el que se abordarán el estado actual y la evolución de sus planes de gestión, así como los procesos participativos de la ciudadania en la elaboración de los mismos.
La Jornada ha sido inaugurada por el Alcalde de Santiago, Martiño Noriega, y el Alcalde de Cuenca, Ángel Mariscal, Presidente de la Comisión de Patrimonio del Grupo de Ciudades Patrimonio, la Directoras del Consorcio de Santiago y la Directora General de Patrimonio de la Xunta de Galicia.
A la reunión asisten todos los concejales y técnicos de Patrimonio de las quince ciudades españolas Patrimonio de la Humanidad; María Agúndez, jefa de Área de Patrimonio Mundial del Ministerio de Cultura, desde donde se impulsa que las comunidades autónomas y los ayuntamientos redacten los correspondientes planes de gestión; y el director general de Patrimonio de la Xunta de Castilla y León, Enrique Saiz, desde donde se promovieron los únicos Planes de Gestión ya aprobados que existen en la actualidad en España, los de las ciudades de Salamanca y Segovia.
Sobre los Planes de Gestión:
La inscripción en la lista del Patrimonio Mundial de acuerdo a la Convención de la UNESCO de 1972 sobre la protección del patrimonio mundial, cultural y natural, supone el reconocimiento de sus valores excepcionales y la obligación de documentarlos, protegerlos, conservarlos, rehabilitarlos y transmitirlos a las generaciones futuras.
A lo largo de los años de vigencia de la Convención se han ido precisando las directrices, los criterios, la metodología y las estrategias para el desarrollo de los objetivos de esta norma internacional, orientados a la preservación, tutela, gestión y transmisión de estos bienes.
De esta manera se ha establecido por la UNESCO la necesidad de elaborar Planes de Gestión de cada uno de los bienes inscritos como Patrimonio Mundial, actualizando paulatinamente las primeras inscripciones con una documentación más extensa, revisada y adaptada a las nuevas tecnologías y, fundamentalmente, con una planificación de futuro que ordene su gestión y defina las competencias y responsabilidades de las instituciones, organismos y agentes implicados en tutelar, proteger y conservar estos bienes de acuerdo a principios de sostenibilidad y de compatibilidad del desarrollo económico y social con las características culturales de los bienes.
Estos Planes de Gestión deben tener en cuenta las características de los bienes desde una óptica actualizada de la gestión y conservación del patrimonio cultural y la participación de los agentes e instituciones vinculadas con cada uno de los bienes reconocidos como Patrimonio Mundial.
La redacción de estos Planes de Gestión debe suponer un intenso debate en diferentes ámbitos para reflexionar sobre cuáles son los mejores instrumentos y criterios estratégicos para lograr los objetivos de la Convención de la UNESCO de 1972. La realización de estos Planes está suponiendo una constante revisión y actualización de la metodología de trabajo.