El vicepresidente ha podido conocer de primera mano la preocupación e incertidumbre que generan las exigencias del Gobierno central para poder abrir instalaciones deportivas en condiciones de seguridad. Precisamente, ha hecho hincapié en que “el deporte va a ser un aliado para salir de la crisis generada por el COVID-19 y para recuperarnos física y anímicamente del confinamiento”.
“Si queremos salir de esta situación y recuperar la normalidad, el deporte y la salud tienen que seguir vinculados”, ha apuntado Aguado. Tras subrayar que el deporte “mejora las defensas y nos prepara para posibles enfermedades y rebrotes”, el vicepresidente ha expresado el compromiso del Ejecutivo regional con el sector. “Vamos a estar de su lado”, ha señalado, “el deporte debe tenerse en cuenta a la hora de desescalar no solo como capital que genera empleo y riqueza, sino como forma de recuperar la normalidad”.
Junto al vicepresidente, han asistido a la reunión el presidente de la Asociación Madrileña de Empresarios de Servicios Deportivos (ASOMED), Adolfo Ruiz, el fundador y vicepresidente de la Fundación España Activa y GO Fit, Gabriel Sáez, el adjunto a la presidencia de Ingesport, Alfonso Arrollo, y la presidenta del Colegio Oficial de Licenciados en Educación Física y Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, (COPLEF), Rosa de Tapia. También ha estado presente el viceconsejero de Deportes, Roberto Núñez.
Una vez finalizada la reunión, el vicepresidente regional ha remarcado que los gimnasios y el sector deportivo “están listos y preparados” para pasar de fase, y que ya han realizado “inversiones importantes para garantizar la renovación del aire de las instalaciones y la separación entre usuarios, técnicos e instructores”.
Sin embargo, en palabras de Aguado, “hay medidas impulsadas desde el Gobierno de España que van en la dirección contraria a los intereses de este sector”, como la restricción de aforos en gimnasios. Una medida que es “contraproducente para estas instalaciones” y que va a impedir que muchas abran en la fase 1. “Los costes fijos son demasiado altos como para abrir, por eso planteamos cambiar la restricción de aforo por una exigencia de distancia social”, ha afirmado.
El sector deportivo cuenta con más de 1.500 instalaciones en la región y genera más de 70.000 empleos directos. Un tipo de empleo, además, que exige altos niveles de preparación y que está compuesto en buena medida por población joven.