➢ La compañía despliega una de las redes inteligentes más avanzadas del mundo, complementando los nuevos contadores con la digitalización de su infraestructura y sistemas: más del 93% de sus clientes en la región ya disfrutan de las ventajas que ofrece esta moderna tecnología
➢ Esta iniciativa lleva un año de adelanto sobre los plazos previstos y supondrá una inversión de 180 millones de euros en la comunidad
➢ El objetivo principal de este proyecto es preparar la red para proporcionar los servicios que se requieran a futuro, con calidad y eficiencia, contribuyendo al desarrollo del país y al bienestar de los ciudadanos
Iberdrola Distribución ha superado la cifra de 1,4 millones de contadores digitales instalados en Castilla y León y la infraestructura que los soporta adaptada a red inteligente, lo que supone que la compañía ya ha modernizado más del 93% de su parque de contadores en la región.
Además, Iberdrola ha adaptado cerca de 11.000 centros de transformación distribuidos por toda la comunidad autónoma, a los que ha incorporado capacidades de telegestión, supervisión y automatización.
El proyecto STAR (Sistema de Telegestión y Automatización de la Red) es una ambiciosa iniciativa de la compañía que complementa la obligación legal del cambio de contadores –con un potencia igual o inferior a 15 kilovatios y que en el caso de Iberdrola en Castilla y León asciende a 1,5 millones de equipos– con una extensiva modernización y digitalización de la red eléctrica, que prepara esta infraestructura crítica para los servicios que requieran los clientes en el futuro.
Este desarrollo coincide con la vocación de Iberdrola de proporcionar un servicio de calidad a sus clientes, de forma eficiente, asegurando que su red eléctrica esté preparada para futuros servicios y requerimientos, contribuyendo así al desarrollo de la economía del país y el bienestar de sus ciudadanos.
Los clientes de Iberdrola pueden consultar por medio de una App móvil o a través de la página web –www.iberdroladistribucion.es– sus curvas de consumo diario, semanal y mensual, así como la demanda de potencia máxima, entre otros muchos datos. Esta información permite conocer la forma en la que se distribuye el consumo de energía eléctrica y hacer un uso eficiente del mismo, así como decidir el tipo de tarifa que se adapta mejor a cada perfil. La telegestión permite realizar con inmediatez y de forma
remota los servicios que el cliente requiera, tales como cambios de potencia contratada, lecturas puntuales del contador, tramitación de las altas o bajas de los contratos, etcétera.
La adaptación a red inteligente posibilita a Iberdrola monitorizar y actuar a distancia y de forma automática sobre la red eléctrica, con lo que puede adelantarse a posibles incidentes y mejorar la calidad de servicio a los clientes. La información disponible permite operar la red eléctrica de distribución de forma más eficiente, reduciendo las pérdidas y de manera más segura.
Iberdrola emplea los más altos estándares internacionales y robustos algoritmos de cifrados de máxima seguridad que garantizan la autenticación, confidencialidad y privacidad de cada uno de sus equipos digitales mediante identificaciones únicas de usuario y contraseña. Además, los contadores digitales emplean claves criptográficas de alta seguridad, de acuerdo a los estándares establecidos internacionalmente en el sector y que permiten que los paquetes de datos salgan cifrados y autenticados.
La digitalización de la red –disponer de una infraestructura que transporta electricidad y datos– facilita la integración de la energía renovable distribuida, la gestión de una red que cada vez va a ser más activa y la futura integración masiva de los vehículos eléctricos. Adicionalmente, la información recibida sobre el estado de funcionamiento de la red permite optimizar las inversiones necesarias, mejorar las labores de mantenimiento y, en definitiva, contribuir a ganar eficiencias en la actividad.
Efecto tractor de Iberdrola sobre el tejido empresarial
La inversión de Iberdrola en esta iniciativa en Castilla y León alcanzará los 180 millones de euros, gracias a los cuales en 2018 los más de 1,5 millones puntos de suministro a los que la empresa da servicio en la región tendrán contadores inteligentes y sus más de 14.000 centros de transformación también funcionarán con esta tecnología.
Gracias a la progresiva implantación de las redes inteligentes en España, Iberdrola pone de manifiesto nuevamente su relevante efecto tractor sobre el tejido empresarial nacional, con el correspondiente impacto positivo sobre el mantenimiento y la creación de empleo.
Iberdrola está desarrollando proyectos similares en los países donde lleva a cabo su actividad, siempre que se den las condiciones regulatorias apropiadas, lo que permite a las empresas que colaboran en el proyecto STAR acceder a oportunidades de negocio importantes.