De las 987 viviendas, el 85% fueron de segunda mano
Las ejecuciones hipotecarias sobre viviendas se redujeron en Castilla y León en el pasado año un 48,2 por ciento, al pasar de las 1.907 a las 987, retroceso mayor al experimentado por el conjunto de España, donde la caída fue del 31,4 por ciento según los datos ofrecidos hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
De las 987 viviendas hipotecadas en la Comunidad, 840 eran de segunda mano 147 nuevas, mientras que 542 estaban en manos de particulares y 445 eran propiedad de entidades jurídicas. Además de las viviendas, el pasado año se ejecutaron también en Castilla y León 298 fincas rústicas, 323 solares urbanos y 957 de otra naturaleza urbana, que sumadas a las propias viviendas alcanzaron las 2.565.
Las comunidades con mayor número de certificaciones por ejecuciones hipotecarias el pasado año fueron Andalucía (11.581), Valencia (7.638), Cataluña (6.956), Madrid (3.498) y Murcia (2.582). Por su parte, País Vasco (214), Comunidad Foral de Navarra (233) y La Rioja (284) tuvieron los menores.
En el periodo 2003-2015, el 0,44 por ciento de las hipotecas constituidas sobre viviendas iniciaron una ejecución hipotecaria en el año 2016. Región de Murcia (0,72 por ciento), Andalucía (0,65 por ciento) y Comunitat Valenciana (0,61 por ciento) registraron los valores más altos. Por el contrario, País Vasco (0,06 por ciento), Galicia (0,19 por ciento) y Castilla y León, Principado de Asturias y Comunidad Foral de Navarra (las tres 0,23 por ciento) presentaron los más bajos.
Analizando sólo los dato del cuarto trimestre del año, en Castilla y León se ejecutaron 189 viviendas, un 52 por ciento menos que en el cuarto trimestres de 2015, cuando se alcanzaron las 394 viviendas. A excepción de dos, todas era viviendas de segunda mano. Además, también se ejecutaron 44 fincas rústicas, 13 solares y 210 fincas de otro tipo.
ICAL